Abel Barajas
Agencia Reforma
Distrito Federal— La Procuraduría General de la República (PGR)concluyó que la verdad histórica de los hechos en el caso Ayotzinapa es que los 43 normalistas fueron ejecutados e incinerados en el basurero de Cocula, Guerrero.
Integrantes del grupo del crimen organizado Guerreros Unidos asesinaron a los estudiantes porque creían que eran miembros de la banda rival ‘Los Rojos’, determinó la Procuraduría.
Jesús Murillo Karam, titular de la PGR, anunció en conferencia que, al haber certeza jurídica sobre la muerte de los estudiantes, la dependencia solicitará órdenes de aprehensión contra los implicados por el delito de secuestro con la agravante de homicidio y pedirá la pena máxima de 140 años de prisión.
“Muchos otros elementos aportados durante la investigación permitieron realizar un análisis lógico causal y llegar sin lugar a dudas a concluir que los estudiantes normalistas fueron privados de la libertad, privados de la vida, incinerados y tirados al Río San Juan.
“Esta es la verdad histórica de los hechos, basada en las pruebas aportadas por la ciencia”, dijo Jesús Murillo Karam, titular de la PGR al señalar que “los normalistas fueron privados de la libertad, privados de la vida, incinerados y tirados al Río San Juan”.
Murillo citó como evidencia los contenidos de 487 peritajes, 156 inspecciones ministeriales, 386 declaraciones y 39 confesiones de los implicados directamente en el crimen masivo ocurrido el 26 de septiembre entre Iguala y Cocula.
Durante la conferencia, en la que también participó Tomás Zerón de Lucio, jefe de la Agencia de Investigación Criminal, la PGR exhibió las declaraciones ministeriales y confesiones videograbadas de Patricio Reyes Landa “El Pato” y Felipe Rodríguez Salgado “El Terco”, dos personajes clave en la ejecución e incineración de los normalistas.
Los presuntos miembros de 'Guerreros Unidos' confesaron que dos de los estudiantes secuestrados, de nombres Bernardo Flores Alcaraz “El Cochiloco” y Miguel Ángel Hernández Martínez “El Patilludo”, eran miembros de 'Los Rojos'.
Antes, el normalista y también víctima José Luis González “El Flaquito” había señalado a ambos como los que encabezaban las actividades de “boteo” y quienes los llevaron desde Ayotzinapa hasta Iguala en autobuses tomados por la fuerza.
Según los presuntos criminales, los dos normalistas que supuestamente estaban vinculados a 'Los Rojos' –los únicos con cabello largo, de entre los 43– operaban a instancias del director de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa y estaban infiltrados en las marchas y el activismo de los estudiantes.
Murillo enfatizó que eso es lo que dicen los supuestos delincuentes, no la PGR.
El procurador señaló que la confesión de Felipe Rodríguez, “El Cepillo”, –jefe de sicarios del grupo del crimen organizado– coincide con las versiones de otros detenidos sobre los hechos, lo que permite tener la certeza legal de que los estudiantes fueron asesinados.
En tanto, Zerón dijo que “El Cepillo” confesó que él dio la orden de terminar con la vida de los estudiantes.
“Este arresto ha sido clave durante la investigación no solamente por testimonios, lo señalan como quien dirigió la operación conduciendo a las víctimas al basurero, interrogándolas y dando la orden de ejecutarlas e incinerarlas”, afirmó.
Murillo señaló que los dictámenes científicos comprueban que hubo un gran incendio con diesel y gasolina, plástico, llantas, madera y otros materiales recolectados en la zona para calcinar los restos de los normalistas, lo que también coincide con las declaraciones de los detenidos.
Abundó que de manera contundente ha quedado acreditado que los restos y materiales encontrados en las bolsas del Río San Juan corresponden químicamente con los encontrados en el basurero, lo que comprueba a plenitud que del basurero fueron llevados en bolsas y tirados al río.
Señaló que la dependencia cumplió con su responsabilidad de perseguir a los delincuentes y que velará porque se les imponga una pena ejemplar para que no vuelva a ocurrir un caso similar.
Asimismo, expresó sus condolencias a los padres de las víctimas y destacó que sus representantes legales han tenido acceso directo a los 85 tomos del expediente del caso, donde se incluyen todos los dictámenes y confesiones.
Cuestionado sobre si el caso se dará por cerrado, Murillo respondió que los elementos de la averiguación son suficientes, pero que aún falta por detener a responsables.
Finalmente, aseveró que no hay una sola evidencia de que el Ejército haya participado de alguna manera en los hechos.
Seguirá la lucha: padres
Tras el anuncio de la PGR sobre el caso Iguala, el vocero de los padres de normalistas desaparecidos, Felipe de la Cruz, advirtió que seguirán con la lucha de buscar a sus hijos desaparecidos y encontralos con vida.
Además, rechazó que la PGR concluya que la verdad histórica sobre los hechos del 26 de septiembre sea que los estudiantes fueron calcinados.
“Repudiamos la forma en que el procurador pretender cerrar de forma descarada la investigación”, advirtió de la Cruz.
El vocero acusó al presidente Enrique Peña Nieto de no informarlos sobre los avances en las indagatorias y de darles acceso a todas las actuaciones.
En su oportunidad, el abogado de los padres, Vidulfo Rosales, acusó al Gobierno federal de tener prisa por cerrar una investigación que no es concluyente.
Aseveró que el caso de la desaparición de 43 normalistas se enfila hacia la impunidad, por lo que acudirán a instancias internacionales.
La evidencia incluye
487
peritajes
156
inspecciones ministeriales
386
declaraciones
39
confesiones de los implicados