El Universal
2014-12-17
Distrito Federal–La socióloga Erika Barrón, avecindada en Cuernavaca, Morelos, increpó ayer al presidente Enrique Peña Nieto y le exigió “pedir perdón” por la falta de cumplimiento de promesas de campaña, por la reforma fiscal y la inseguridad.
Al llegar a la Asamblea General Ordinaria del Consejo Nacional Agropecuario, en Santa Fe, el mandatario realizó su cotidiano saludo a las personas que se encuentran a su paso rumbo al presídium.
Cuando se acercaba a su lugar, Érika Barrón, perteneciente a la Agencia de Servicios Especializados para el Desarrollo, sacó de su bolso una cinta color verde y ahí escribió “pide perdón”.
Una acción que, narra ella misma, había hecho antes con el entonces presidente Felipe Calderón “porque desde el principio consideré que era espurio”. Aclara que nunca ha buscado protagonismo.
Cerca el presidente Peña Nieto, la socióloga por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mostró la cinta, pero el Estado Mayor Presidencial la retiró de inmediato del salón de la Expo Bancomer y la llevó hasta su auto para que abandonara el inmueble. No hubo gritos.
Horas más tarde, en un café de la colonia Napolés, Barrón muestra su bolso, la cinta verde, un puñado de marcadores y unas tijeras escolares y narra en entrevista qué fue lo que hizo y cómo fue desalojada del inmueble. Considera que fue violentada.
“Si el país está entrando en una crisis muy seria debemos pedir perdón todos. Como ciudadanos creo que nos ayudaría mucho que todos comenzáramos a pedir perdón, somos unos dejados por dejar que crezcan este tipo de figuras”, dice.
Se disculpa con el Consejo Nacional Agropecuario pues asistió como invitada.
“Yo creo que un gobernante sabio lo agradecería porque el perdón es lo que nos puede llevar a dejar de sentir esta incertidumbre y crisis permanente. Debe pedir perdón porque las promesas de campaña en realidad han beneficiado a pocos”, dijo.
Se le pregunta si hizo esta protesta por el caso Iguala, responde que “todo está unido”.