Nacional

Las bajas del cártel Beltrán Leyva

Agencias

2014-10-01

Héctor es tercero de los hermanos Beltrán Leyva en ser capturado. Entre las bajas del grupo figura también la muerte de Arturo, fallecido durante un enfrentamiento con la Marina en diciembre del 2009, y quién hasta el día de su muerte se ostentaba como el líder de la organización que lleva sus apellidos.
El primer revés de la familia lo sufrieron en enero de 2008 con la detención de Alfredo. Informes oficiales indican que la detención del menor de los Beltrán Leyva ocasionó una fractura con Joaquín 'El Chapo' Guzmán, a quien los hermanos acusaban de haber 'soplado' la ubicación a las autoridades.
Alfredo Beltrán Leyva ‘El Mochomo’ fue capturado el lunes 21 de enero del 2008 en Culiacán por elementos de élite durante el cateo a un inmueble ubicado en la capital sinaloense.
El operativo se inició a las 3 de la madrugada en la vivienda ubicada en la avenida Juan de la Barrera 1978, entre Burócratas y Abogados, colonia Burócrata. Participaron elementos del Ejército Mexicano adscritos a la novena Zona Militar, quienes posteriormente entregaron a Beltrán Leyva y a tres de sus cómplices a la Procuraduría General de la República (PGR).
Alfredo Beltrán fue acusado de realizar operaciones de transporte de droga, blanqueo de dinero y cooptación de funcionarios públicos en Sonora, Chihuahua, Durango, Jalisco y Nayarit, así como de dirigir a los grupos de sicarios conocidos como Los Pelones, en el estado de Guerrero, y Los Güeros o Los Güeritos, en el estado de Sonora.
También enfrentaba una orden de detención provisional con fines de extradición a Estados Unidos, girada por el juzgado octavo de distrito de procedimientos penales con sede en el Reclusorio Sur.
El hecho se anunció como el golpe más importante del actual gobierno contra la estructura del cártel de encabezado por su hermano Arturo.
El cateo
A bordo de vehículos Hummer, y portando artillería pesada, unos 300 elementos militares y federales arribaron al domicilio de la colonia Burócrata, de Culiacán, el cual catearon durante unas cuatro horas.
La acción militar, que concluyó aproximadamente a las 7 de la mañana, se realizó en la misma zona donde en octubre de 2006 fue asesinado el comandante del Grupo de Reacción Inmediata de la Policía Ministerial, Luis Rosario Medina.
De acuerdo con los primeros reportes, en el operativo fueron decomisados una camioneta marca BMW, modelo X3, 900 mil dólares, un estuche con 11 relojes finos, un fusil AK-47 y ocho armas cortas.
También fueron detenidos Javier Hugo Urquiza Inzunza, Flavio Manuel Castro León y José Uistesingo Barraza, quienes brindaban protección al presunto narcotraficante. Los cuatro detenidos fueron trasladados en un avión de la Fuerza Aérea Mexicana a la ciudad de México.
Alfredo Beltrán Leyva es originario del poblado La Palma, del municipio sinaloense de Badiraguato, ubicado en la zona serrana del centro del estado, a unos cinco kilómetros de la comunidad La Tuna, donde nació El Chapo Guzmán.
En su momento, el embajador de Estados Unidos en México, Antonio O. Garza, dijo que las autoridades mexicanas “tuvieron una significativa victoria al detener a Alfredo Beltrán Leyva”, a quien definió como “uno de los principales líderes del cártel de Sinaloa”.
En un comunicado de prensa, el diplomático estadunidense también reconoció el compromiso del presidente Felipe Calderón en la lucha contra el crimen organizado, “para pegarles donde les duele”.
Apuntó que el beneficio de este tipo de acciones es para ambos países. “Cuando México saca a peligrosos criminales como Beltrán Leyva y sus secuaces de las calles, el pueblo de Estados Unidos también se beneficia”, dijo.
La caída de Arturo
Arturo Beltrán Leyva –El jefe de jefes, líder del cártel de los Beltrán Leyva– y tres de sus escoltas murieron el miércoles 16 de diciembre del 2009 durante un enfrentamiento con elementos de la Secretaría de Marina, ocurrido en el fraccionamiento Altitude de Cuernavaca, Morelos.
La cacería por el líder de este grupo inició días antes, la madrugada del 11 de diciembre, en una mansión ubicada en el municipio de Tepoztlán, Morelos.
En ese lugar miembros de las fuerzas especiales de la Armada realizaron un operativo al obtener información sobre una fiesta de narcotraficantes en la que estaban presentes los líderes del cártel de los Beltrán Leyva y Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, jefe de sicarios de la organización.
El operativo sorpresa derivó en un enfrentamiento de casi dos horas. Según fuentes oficiales, al inicio de la refriega lograron escapar de la finca los hermanos Arturo y Héctor Beltrán Leyva, así como La Barbie.
Tras el tiroteo 11 sicarios fueron detenidos y tres más resultaron muertos. Fueron aprehendidas otras 40 personas, entre ellas los integrantes de los conjuntos musicales Los Cadetes de Linares, Ramón Ayala y sus Bravos del Norte, así como el Grupo Torrente.
El jefe de jefes habría resultado herido y trasladado a una casa del conjunto habitacional Altitude, zona residencial y de hospedaje de lujo que se localiza en la colonia Lomas de la Selva.
Cinco días después del primer enfrentamiento, a partir de las 17 horas, más de un centenar de elementos de la Armada y del Ejército rodearon el conjunto habitacional y cerraron el tránsito en cuatro avenidas aledañas, al tiempo que dos helicópteros comenzaron a sobrevolar la zona.
Los habitantes de Altitude indicaron que en su búsqueda los marinos irrumpieron en cada una de las viviendas y en algunos casos derribaron las puertas.
Al iniciar el operativo, todos los habitantes del conjunto fueron reunidos en la cancha del gimnasio. Les pidieron que apagaran sus teléfonos celulares.
Al filo de las 20 horas se comenzaron a escuchar ráfagas de armas de fuego y detonaciones de granadas.
Según versiones obtenidas de fuentes federales, Arturo Beltrán y un grupo de sicarios trataron de romper el cerco castrense, por lo cual se inició la refriega.
Un marino herido fue trasladado al hospital general José G. Parres, ubicado a 100 metros del fraccionamiento, y minutos después los ocupantes de una camioneta lanzaron una granada contra los soldados que vigilaban el nosocomio, sin que se reportaran lesionados.
Casi simultáneamente, las instalaciones de la 24 Zona Militar, con sede en Cuernavaca, fueron tiroteadas por sujetos a bordo de varias camionetas.
Al filo de las 22:20 horas los marinos sacaron del fraccionamiento Altitude a cuatro personas. Los habitantes los identificaron como trabajadores del lugar.
Diez minutos después arribaron tres tanquetas, una ambulancia militar y una camioneta artillada.
Al filo de las 22:40 horas un helicóptero de la Marina sobrevoló la zona y llegaron tres vehículos tipo Hummer y dos camionetas artilladas, que se apostaron en calles aledañas a Altitude.
Al transcurrir de las horas, las granadas se fueron acabando y dos de los tres sicarios que acompañaban a El jefe de jefes murieron en la sala. Un tercer hombre decidió saltar por los ventanales para suicidarse. En su caída una bala le dio en la espalda. Se desplomó en el patio de un departamento de la planta baja, con la cara al cielo y los brazos en cruz.
En total cinco sicarios y su jefe murieron en el condominio Altitude, que se localiza en la colonia Vista Hermosa, una de las zonas donde habitan las familias de alta capacidad económica en la capital morelense.
Según versiones de marinos que participaron en el enfrentamiento, al filo de las 19 horas uno de sus compañeros cayó en las escaleras de emergencia, herido por una granada de fragmentación.
Lo anterior obligó al grupo de asalto a detener su incursión en el segundo piso, hasta que ya no oyeron detonaciones de granadas.
Al filo de las 21 horas, de acuerdo con los testimonios obtenidos, El Barbas abrió la puerta de su departamento y enfrentó a tiros a los marinos con la intención de abrirse paso para huir por el elevador del edificio; sin embargo, cayó abatido por los oficiales que subían por las escaleras. El cuerpo quedó frente a la puerta de su departamento.
Tras la muerte de Beltrán Leyva el lugar quedó bajo el resguardo de los marinos. A la una de la madrugada con cinco minutos se presentaron los peritos de la Procuraduría General de Justicia de Morelos. Al filo de las dos se autorizó que algunos representantes de medios de comunicación ingresaran al departamento 201.
Así se pudo apreciar que sobre la mesa del comedor había un álbum fotográfico, dos charolas con fruta y un bolso de mujer. Sobre los sillones de la sala había una bolsa de plástico con cartuchos para cuerno de chivo, un collar de santería, tres rifles de asalto y dos pistolas. En la recámara principal quedaron juguetes, una biblia, un libro, imágenes religiosas y un rosario; sobre la cama, una colcha con una enorme mancha de sangre. En el armario quedaron colgados camisas y pantalones de la marca Hugo Boss y unas botas de piel de cocodrilo.
A algunos fotógrafos se les permitió hacer tomas del cadáver de Beltrán Leyva. Las placas muestran al capo con los pantalones a la altura de las rodillas. La playera la tenía enrollada hasta el pecho y en la trusa un letrero con el número tres.
Asimismo, hay imágenes en las que se aprecia a hombres vestidos de civil, que supuestamente son peritos de la procuraduría morelense, moviendo el cuerpo para ponerlo sobre una sábana.
Supuestamente Beltrán Leyva portaba imágenes religiosas y un rosario, así como 40 mil dólares y miles de pesos al momento de su muerte. Algunos de esos billetes fueron colocados alrededor y sobre el cadáver cubierto de esquirlas de granadas de fragmentación. Se señaló que nadie supo quién movió los objetos y no se ofreció explicación oficial acerca de la vejación que sufrió el cuerpo.

Carlos, el Beltrán Leyva menos buscado
Dos semanas después de ser abatido Arturo autoridades federales lograron la captura de Carlos Beltrán Leyva, quien no figuraba en la lista de delincuentes más buscados publicada por la Procuraduría General de la República (PGR).
En un comunicado, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal informó que agentes de la Policía Federal (PF) lograron aprehender a Carlos el 30 de diciembre del 2009 en Culiacán, Sinaloa.
Al momento de su detención, Carlos Beltrán Leyva presentó una licencia de conducir con el nombre de Carlos Gámez Orpineda. Sin embargo, cuando los federales consultaron el documento en el Centro de Inteligencia de la PF se descubrió que era falso.
La dependencia destacó que desde 2008 existía una orden de localización y presentación contra Carlos Beltrán Leyva, de 40 años, derivada de una averiguación previa radicada en Culiacán. Trascendió que esta orden judicial era del fuero común.
Añadió que cuando fue detenido, el hermano del líder del cártel de los Beltrán Leyva portaba un arma tipo escuadra calibre 45 marca Charlesdal, un cargador y ocho cartuchos útiles, un arma larga JLD Interprises Inc .308, tres cargadores y 54 cartuchos útiles, así como aparatos de comunicación, objetos que fueron decomisados por los agentes.
Extraoficialmente se aseguró también que la captura del hermano de El jefe de jefes habría ocurrido en Los Mochis, cabecera municipal de Ahome, zona aparentemente controlada por los hermanos Beltrán Leyva. Esta última versión atribuía la detención a efectivos de la Marina.

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