Agencias
2014-10-01
Distrito Federal— El senador panista Ernesto Ruffo Appel advirtió que en breve habrá una insurgencia en su partido por la decisión del presidente Gustavo Madero de pedir licencia para buscar una diputación federal, luego la coordinación de diputados y mantener la dirigencia.
La insurgencia, dijo, se gesta en esta coyuntura de un presidente que pide ausentarse para propósitos muy particulares. Cuando se dan asuntos coyunturales específicos que no abonan a la institucionalidad entonces este movimiento toma rumbo.
Cuestionó que en los últimos años Acción Nacional se ha alejado de la ciudadanía, es momento de volver a acercarse a ellas.
Para el senador por Baja California, la decisión de Madero perjudica al PAN porque impide que haya continuidad en la dirección del partido, cuando deben prepararse las campañas federales para renovar la Cámara de Diputados y las locales para 17 entidades, en nueve de las cuales se elegirá gobernador.
“Esto, si bien es legal, habla de que su cabeza, la del presidente nacional del partido, está en cosas particulares que trascienden sus responsabilidades como jefe nacional”, dijo en entrevista.
En 2013, Ruffo y otros militantes fundaron el movimiento Panistas por México, que entonces exigió a los grupos de Madero y de Cordero superar sus diferencias y buscar la unidad del PAN.
Sin embargo, las confrontaciones se han mantenido y, según los legisladores consultados, se prevé que crezcan con la licencia de Madero y con el próximo inicio de las contiendas internas por las candidaturas a cargos federales y locales.
“Creo que esto no es una buena señal para el bienestar de Acción Nacional”, dijo Ruffo al respecto.
Al reclamo se sumó la senadora Rosa Adriana Díaz Lizama, miembro de la Comisión Permanente del PAN, quien tachó de “lamentable” la decisión de Madero, porque en su opinión representa “una falta de respeto” para los militantes que apenas en mayo pasado votaron por su reelección.
“Ayer (el martes) lo expresé ante la Comisión Permanente. Es un hecho lamentable. Fue la primera vez que el partido tuvo la oportunidad de elegir a su dirigente por los militantes, y por una decisión personal del presidente Madero, deja el cargo y se va por una diputación. Creo que es una falta de respeto total a la militancia panista, es una falta total de respeto al mismo partido”, dijo Díaz Lizama.