Milenio
2014-07-23
Distrito Federal— Legisladores de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados anticiparon la intención de que el gobierno federal asuma como deuda pública parte del pasivo laboral de Pemex y de la CFE, que en conjunto representa cerca de 1.9 billones de pesos.
Tan solo el pasivo en materia de pensiones y salud en Pemex asciende a un billón 347 mil millones de pesos, mientras el de la CFE ronda los 500 mil millones, detalló el vicecoordinador perredista Miguel Alonso Raya.
Al aprobar en lo general las nuevas leyes de Pemex y del CFE con un adendum, la Comisión de Energía concedió por lo pronto a los consejos de administración de ambas empresas la facultad de autorizar el uso de los ingresos excedentes “para cubrir sus pasivos laborales de corto y largo plazo en materia de pensiones y salud”.
En ese contexto, el legislador priista Ricardo Aldana, integrante de la dirigencia del Sindicato de Trabajadores Petroleros, puntualizó:
“Es claro que debemos asegurar que los sistemas pensionarios en ambas empresas sean plenamente sostenibles y de forma complementaria se requiere que el gobierno federal asuma parte del pasivo laboral para dejar a nuestras empresas en condiciones de competitividad: solo así podrán competir de forma exitosa en el nuevo entorno que establece esta reforma”.
La también priista Irazema González remarcó a su vez que los artículos transitorios de la reforma constitucional en materia energética garantizan el respeto a los derechos de los trabajadores tanto en activo como jubilados de Pemex y de la CFE.
Por ello, dijo, “habremos de proponer al Congreso de la Unión que el pasivo laboral de Pemex, en congruencia con el espíritu de modernización y las nuevas condiciones para la eficiencia y competitividad de las empresas productivas del Estado, deberá ser asumido por el gobierno federal a través de la Secretaría de Hacienda y así se considere en el paquete económico para 2015”.
Incluso el perredista Miguel Alonso Raya subrayó la necesidad de prever en las leyes energéticas los elementos para financiar el pago del pasivo para los pensionados y beneficiarios actuales, así como convocar a las partes a pactar la reestructuración del sistema de pensiones y detener la trayectoria creciente de esos compromisos laborales.