Reforma
2014-03-05
Distrito Federal ─ Un grupo de acreedores de Oceanografía, empresa intervenida por el Gobierno bajo cargos de lavado y fraude, informó que tomó control de cuentas bancarias y el barco OSA Goliath y buscan venderlo para así liquidar la deuda de la empresa con ellos.
La firma noruega Norsk Tillitsmann, fiduciario del bono por 160 millones de dólares que emitió en octubre de 2013 OSA Goliath, subsidiaria de Oceanografía, publicó una carta donde explica que desde el 28 de febrero pasado la empresa entró en default por la totalidad del bono e intereses, que ascienden a un total aproximado de 215 millones de dólares.
Los bonos fueron respaldados por el barco Goliath, una nave construida en 2009 con un valor de unos 245 millones de dólares según estimados de Kennedy Marr y Offshore Shiprokers, que fueron citados en el memorándum de oferta de los bonos.
Oceanografía no pagó por el arrendamiento del buque a su subsidiaria OSA Goliath, que tiene domicilio fiscal en Singapur, lo que es suficiente para declarar default según los términos de los bonos, dijo Norsk.
Un fiduciario es una empresa a la cual se le otorgan poderes por el emisor de un bono para asegurar que se cumplan con los términos del mismo -como el pago de intereses en la fecha acordada- y que se protejan los intereses de los acreedores en caso de default.
Debido a esto, Norsk Tillitsmann reemplazó el consejo directivo de OSA Goliath con directores independientes, quienes suspendieron el contrato de arrendamiento de buque que OSA Goliath tiene con Oceanografía, su empresa matriz.
"El nuevo consejo de directores del emisor ha terminado el arrendamiento de buque con Oceanografía y asumió control de la nave del emisor OSA Goliath, y ha informado a Norsk Tillitsmann que buscará vender la nave de una manera ordenada", explicó la carta del fiduciario, firmada por Fredrik Lundberg.
Lundberg señaló que los directores proveerán más información sobre el proceso de venta más adelante y agregó que ejecutó su derecho fiduciario sobre ciertas cuentas de banco del emisor, recibiendo un total de 8 millones 927 mil dólares.
El documento no mencionó si Norsk tiene control físico del barco, que se encuentra a 33 kilómetros de la costa de Ciudad del Carmen, Campeche, de acuerdo a datos de Bloomberg.
El viernes pasado, el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) de la Secretaría de Hacienda tomó control de las oficinas, naves y plataformas de Oceanografía, luego de que Citigroup acusara a la empresa de fraude por al menos 360 millones de dólares mediante la falsificación de facturas por cobrar de Pemex, por las que el banco le había prestado 585 millones a la empresa propiedad de Amado Yáñez.
La denuncia surgió luego de que Oceanografía fue inhabilitada de participar en licitaciones de Pemex debido a malos manejos, lo que impulsó a Citi a realizar una revisión junto con Pemex de las cuentas de la empresa.
Además de este bono, Oceanografía emitió deuda en 335 millones de dólares, que también se encuentra en impago.
Jorge Betancourt, director de relación con inversionistas de Oceanografía, fue contactado para corroborar la información pero refirió las preguntas al SAE.
Marcia Fuentes, vocera de la agencia, no respondió a correos electrónicos buscando comentarios.