Es Michoacán Estado fallido: Obispo

Reforma

Michoacán— La Iglesia católica describió a Michoacán como un estado fallido, a merced de los cárteles de la droga y la colusión de autoridades con el crimen.

Miguel Patiño Velázquez, Obispo de Apatzingán, explicó que el Estado fallido es aquel donde hay ausencia de la ley y la justicia, provocando inseguridad, miedo, tristeza, ira, desconfianza, rivalidades, indiferencia, muerte y opresión.

"El Estado de Michoacán tiene todas las características de un Estado fallido", denunció el jerarca religioso.

Mediante una carta pública, señaló que los grupos criminales de La Familia Michoacana, Zetas, Cártel Jalisco Nueva Generación y Caballeros Templarios, se disputan el territorio estatal como si fuera un botín.

Destacó que en esa lucha están en juego la entrada de droga y los insumos para producir drogas sintéticas por las rutas de la Costa.

Agregó que también lo están el cultivo de mariguana y amapola en la Sierra Madre Sur y la zona aguacatera, así como el establecimiento de laboratorios de narcóticos y refugio de los grupos delictivos.

Las grandes ciudades, destacó Patiño Velázquez, son ahora atractivo para el trasiego y comercio de la droga, la venta de seguridad (cuotas), secuestros, robos y extorsiones.

"Nuestro pueblo de Michoacán tiene años sufriendo las injusticias del crimen organizado, que se han recrudecido en los últimos meses", denunció.

Reveló que en últimas fechas los grupos criminales están obligando a líderes sociales a que exijan la salida del Ejército y Policía Federal.

"Los gobiernos municipales y la Policía están sometidos o coludidos con los criminales, y cada vez más crece el rumor de que el Gobierno estatal también está al servicio del crimen organizado", expuso.

El Obispo cuestionó la falta de resultados del operativo federal implementado a partir de mayo pasado en zonas que disputan autodefensas y criminales.

Evidenció que en esas áreas ahora la delincuencia intenta recuperar las plazas ahogando la economía de los pueblos, dificultando las actividades comerciales e impidiendo el abasto de combustibles.

"Nos llama la atención cómo (los operativos) no han sido capaces de descubrir las casas de seguridad del crimen organizado y que hasta la fecha no hayan liberado a nadie cuando se cuentan por decenas las personas levantadas", cuestionó.

En la carta, que fue reproducida en la página del Episcopado Mexicano, Patiño hace un llamado a las autoridades para recobrar el Estado de Derecho en este territorio.