Milenio
2013-02-01
Distrito Federal— El procurador aseguró que en las investigaciones sobre la explosión en las instalaciones de Pemex se indagarán todas las causas posibles "si se trata de accidente, de una imprudencia o un atentado" para "no dejar nada a la imaginación".
En conferencia de prensa, el funcionario federal dijo que durante las primeras horas el trabajo se enfocó en la búsqueda y atención de todos los lesionados.
“Son mil 300 metros del lugar siniestrado, hoy a las 12:00 horas encontraron a la última víctima del suceso, por lo cual lograron entrar los peritos para iniciar la investigación de estos hechos”, señaló.
Prometió realizar una investigación transparente e invitó al Congreso a designar un observador que vigile los trabajos de peritaje.
"Estamos trabajando sobre todas las posibilidades posibles. No estamos desechando ninguna...
La determinación es no dejar nada a la imaginación", sentenció.
"Estamos atrás de todas las hipótesis", subrayó.
El procurador explicó que unas 2 mil 500 personas trabajan ya en la investigación, que se realiza en 39 cuadrantes de una zona de mil 300 metros cuadrados.
"Indicios de fuego no hay en ningún lado", dijo.
Explicó que en la investigación trabajan peritos de la Sedena, Marina, Protección Civil, Policía Federal y de la misma PGR; las áreas de trabajo son Criminología, Criminalistica, Química, Incendios y Explosivos e
Ingeniería Civil.
Detalló que hoy se encontró a la última víctima reportada, aunque advirtió que los peritos no cesaran de buscar debajo de los escombros.
Murillo añadió que se anunciarán los resultados de la investigación "lo más pronto posible".
Enseguida, inició un recorrido con medios de comunicación en la zona siniestrada.
El funcionario señaló que hay peritos de la Secretaría de la Defensa Nacional, de Marina, de Protección Civil y dos empresas estadunidenses que apoyarán a las labores de investigación.
“Estamos actuando lo más pronto posible, pero no me pongo tiempo porque queremos saber solo la verdad y estrictamente la verdad”, sentenció.