El Universal
2013-01-25Nuevo Laredo— Una secta religiosa que operaba desde el 2010 en Nuevo Laredo fue desarticulada por el Instituto Nacional de Migración (INM) con apoyo de fuerzas federales, quienes aseguraron en el operativo a 24 personas, entre ellas cinco menores de edad y 14 extranjeros, junto con su líder.
El delegado del INM en Nuevo Laredo, Carlos Alberto Franco Chávez, reveló que la desarticulación de la secta "Los Defensores de Cristo", se logró gracias a una denuncia anónima que alertaba sobre la presencia de personas extranjeras en una finca ubicada sobre la carretera nacional a la altura del kilómetro 14.
"Nos llama la atención que las personas traían la ropa sucia, desgarrada, no tenían higiene ni con su persona, dado esto dimos aviso a la PGR para que ellos integraran su averiguación por el probable delito de trata de personas", mencionó el funcionario.
El personal de Migración, acompañado de elementos de la Policía Federal, se trasladaron hasta el lugar encontrándose con una congregación que practicaba una mezcla de ideologías católica, cristiana, budista, islámica, metafísica y hasta de magia, dirigida por un español que tenía su permiso para estar en México ya vencido.
El funcionario federal aseguró que pensaban que todo se trataba de una simple casa de seguridad, pero se encontraron con una congregación religiosa.
Desde hace años, víctimas denunciaron que el líder de la secta, de nacionalidad española, junto con sus "apóstoles" sometían a las mujeres. Dijeron que a sus seguidores les promete realizar milagros, curar enfermedades, lograr el éxito e incluso alejar el dolor.
Investigadores en temas religiosos señalan que la existencia de estas sectas se debe a que los sujetos usan el fanatismo y el sometimiento psicológico para concretar sus fines económicos y de poder.