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El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— El Ministerio Público (MP) adscrito a la Fiscalía General del Estado (FGE) no dio cumplimiento a cabalidad con la orden emitida por un Tribunal de Control de iniciar una investigación por la posible configuración del delito de tortura al parecer cometido por agentes estatales en contra de dos hombres.
El lunes pasado Manuel C. V. y Arturo R. F. denunciaron al juez Adalberto Contreras Payán que elementos de la Comisión Estatal de Seguridad (CES) División Fuerzas Estatales irrumpieron en sus domicilios para golpearlos y exigirles información sobre quiénes eran los responsables de un ataque perpetrado en contra de ministeriales.
Ayer Manuel y Arturo se presentaron de forma voluntaria ante el mismo Tribunal para darle seguimiento al proceso penal instruido en su contra por la droga que presuntamente los agentes estatales les “sembraron” después de golpearlos y pidieron que se atienda su denuncia.
En una entrevista Arturo señaló que él fue sacado de su casa el 19 de octubre como a las 10 de la noche por un grupo de policías estatales que tumbaron la puerta de su casa, maltrataron a su abuela de 66 años, a su esposa, hijas y a una prima, y a él se lo llevaron a punta de golpes.
“Me pusieron la bolsa, una garra con agua (en el rostro), con el rifle también me estaban pegando, me dieron patadones en la cara… me pegaron con los cascos, con las armas, con una tabla en las piernas, el pecho, en la espalda y en la cara traigo un ojo morado… ese día los habían balaceado (a los ministeriales) y querían que nos echáramos la ‘muleta’, hasta nos querían poner un R-15”, señaló aún con miedo.
Además le robaron cuatro pantallas, cinco celulares, tres perros y una Cherokee gris modelo 2006. Él aún no regresa a su casa por temor a represalias.
Manuel señaló que a él lo sacaron en las primeras horas del 20 de octubre de su casa también en la colonia Independencia II. Los policías se lo llevaron a la base policiaca ubicada en eje vial Juan Gabriel y en el estacionamiento lo golpearon durante toda la noche.
“Me encueraron, me mojaron y pusieron los toques como unas ocho veces y me desmayé, los toques me los daban en las pompis y en las piernas, me dieron patadas. A mí me torturaron afuera, me sacaron de las celdas, al intemperie, también me pusieron la bolsa para ahogarme, una toalla mojada en la cara y me echaban agua en la nariz… por la desesperación yo me arrastraba”, dijo al explicar que así se lesionó la cabeza en la que presenta hematomas y costras de sangre seca.