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El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— Un hombre fue sentenciado a un año y seis meses de prisión tras haber sido encontrado culpable de cometer los delitos de intento de violación y lesiones.
Juan Francisco Reyes Peña reconoció su responsabilidad al aceptar ser enjuiciado a través de un procedimiento abreviado y renunció a su derecho a exigir un juicio oral.
La madrugada del 30 de septiembre del año pasado, el ahora sentenciado entró a una casa ubicada en la calle Pascual Jaramillo número 309 de la colonia Corregidora, con el rostro tapado con un pañuelo y portando un cuchillo, para atacar sexualmente a una mujer.
Reyes desnudó a la víctima y cuando estaba a punto de cometer la violación la hija de la mujer —de 10 años de edad— se despertó y tomó una escoba para defender a su madre.
Al ver a la niña Reyes Peña se abalanzó contra ella y le puso el cuchillo en el cuello. La madre también defendió a su hija, iniciándose un forcejeo por el control del arma blanca. Mientras ambos peleaban la niña pidió ayuda a sus vecinos, gritó tan fuerte que también Juan Francisco Reyes Peña salió corriendo de la vivienda pero fue alcanzado por los residentes de las viviendas más próximas y minutos más tarde entregado a elementos de Seguridad Pública.
La mujer —cuya identidad quedó bajo reserva judicial— sufrió varias lesiones principalmente en las manos.
El viernes pasado el juez de Control Jorge Omar Derat Acosta emitió un fallo condenatorio en contra de Juan Francisco Reyes Peña y lo condenó en los términos solicitados por el Ministerio Público (MP) adscrito a la Fiscalía de género, a pasar un año seis meses en la cárcel así como a pagar una multa de 14 mil pesos y nueve mil pesos como reparación del daño por las 20 terapias psicológicas que requiere la víctima.
En una audiencia anterior, la afectada había dado su anuencia para que Reyes fuera sentenciado a través de la figura penal denominada procedimiento abreviado debido a que ella aún se encuentra muy afectada. por lo sucedido y aunque cambio de casa también determinó irse de Ciudad Juárez y ya no deseaba darle seguimiento al proceso. En esa diligencia, la víctima recibió el dinero para las terapias psicológicas.
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