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El Diario de Juárez
Ciudad Juárez- Justicia; ¿cuántos más quieren?”, gritaron ayer familiares del agente municipal Miguel Ángel Salas López a un costado de su féretro y de frente a las autoridades y mandos de la Secretaría de Seguridad Pública que se concentraron para despedirlo con honores.
Poco antes del mediodía toda la corporación municipal, al igual que agentes y mandos de las Policías estatal y federal, así como de investigadores de la Fiscalía y el Ejército, recibieron los restos de Salas López en medio de un duelo generalizado por los siete ataques contra agentes ocurridos este mes.
Disparó contra sus agresores hasta el último momento
En la Estación Sur los familiares del oficial asesinado el pasado jueves esperaban el cuerpo, que fue bajado de una unidad policiaca por seis uniformados con una bandera sobre el féretro.
Apenas iniciaba la ceremonia de honores cuando la familia entró en llanto y los gritos de desesperación se hicieron escuchar, al tiempo del reclamo de “cuántos más quieren” seguido de la exigencia de justicia.
A los pocos minutos los ánimos se sosegaron y enseguida uno de los oficiales rindió al alcalde Armando Cabada las novedades sobre las circunstancias donde perdió la vida el comandante de la Unidad de Análisis y Evaluación de la SSPM.
“A las 0:40 horas del 18 de octubre, en la calle Vistas Azufrosas de la colonia Vista Los Ojitos se constituyó la unidad 330 y dio vista de una persona lesionada de bala con uniforme de la Policía municipal, el cual ya no contaba con signos vitales. Fue identificado en el lugar como el comandante Miguel Ángel Salas López”.
El presidente municipal resaltó la valentía del oficial caído que hasta el último momento logró disparar contra uno de sus agresores, el cual fue localizado muerto más tarde en la misma colonia dentro de una camioneta usada para el crimen.
Cabada recalcó que Salas López contaba con un expediente limpio y que como el resto de los agentes se jugó la vida por tener una ciudad más segura.
El comandante dejó a su esposa y dos hijos de 17 y 11 años, quienes se encontraban en el lugar y fueron los primeros en montar la guardia de honor de su padre, quien fue despedido con salvas y los honores respectivos ante unos 400 asistentes.
En lo que va del mes suman siete ataques con armas largas en contra de agentes de diferentes corporaciones de seguridad. (Staff / El Diario)
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