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El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— A una pena de 87 años y tres meses de cárcel así como la obligación de pagar más de un millón 400 mil pesos, fueron condenados dos hombres tras ser encontrados culpables de haber asesinado a cuatro personas y herir a tres más durante un ataque armado ocurrido en el 2016 en el poblado de San Agustín, en el Valle de Juárez.
Entre la víctimas se encuentran dos estadounidenses, uno de ellos un soldado, quienes habían cruzado la frontera para comprar cerveza.
A Andrés Zarrabal Sánchez y Héctor Manuel Lozano García –quien también se hace llamar Héctor Manuel Lozano Gracia– se les impusieron las penas mínimas para los delitos de homicidio calificado, homicidio calificado en grado de tentativa y daños.
Ambos hombres también fueron condenados a pagar un millón 478 mil 329 pesos como indemnización por muerte y gastos funerarios, así como 169 mil pesos al propietario de un vehículo que fue incendiado.
Los hechos sucedieron el 6 de octubre del 2016 aproximadamente a las 18:00 horas cuando los ahora sentenciados y por lo menos un hombre más llegaron a un negocio denominado “Six la Canasta”, ubicado en la carretera Juárez–Porvenir, del poblado de San Agustín.
Presuntamente Zarrabal entró al establecimiento, amenazó y le ordenó a las víctimas tirarse al suelo para luego dispararles. En la tienda se encontraban Juan Paulo Rodríguez Chacón, Perla Berenice Rodríguez de la Cruz, el soldado Robert Lee Jones, Manuel Óscar Rodríguez Hernández, Jesús Adrián Huerta y Rosina de la Cruz Solís.
Además en el exterior del negocio le prendieron fuego a un vehículo Mazda modelo 2013 con número de terminación de la serie M02717.
Antes de retirarse, Zarrabal Sánchez y Lozano Gracia se percataron que las víctimas aún tenían signos vitales, por lo que se regresaron y desde el exterior volvieron a accionar las armas de fuego.
En el lugar murieron Juan Paulo Rodríguez, Perla Berenice Rodríguez y Robert Lee Jones, todos por laceración encefálica.
Manuel Óscar Rodríguez Hernández también perdió la vida minutos después de haber sido ingresado al Hospital 66 del IMSS.
Mientras que Jesús Adrián Huerta logró sobrevivir aunque sufrió lesiones en la mandíbula, el codo y la mano, todos del lado derecho. Rosina de la Cruz resultó ilesa.
Cuando huían del lugar sobre la carretera Juárez Porvenir y se encontraban a la altura del poblado de San Isidro, presuntamente los ahora procesados le dispararon al niño Eduardo González Astorga, quien iba caminando por el lugar. Él presentó una herida en el glúteo derecho pero no fue presentado al juicio oral, por lo que respecto a él se emitió un fallo absolutorio.
El hecho fue reportado por Rosina de la Cruz Solís a Lupita, una mujer policía encargada de la seguridad en ese sector del Valle de Juárez así como a los dueños de otros expendios denominados “Six”, pues en un principio ella –quien perdió a su esposa y a su hija–, pensó en ese ataque se iba a repetir en las otras sucursales.
Ese mismo día agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) a cargo de la patrulla 526 detectaron que en la carretera Juárez-Porvenir circulaba un vehículo que cumplía con las características reportadas, el cual iba en sentido contrario y a alta velocidad, por lo que emprendieron una persecución por unos 20 minutos hasta el poblado Loma Blanca, donde chocó el piloto de ese automotor.
Unos 30 minutos después del accidente, Zarrabal Sánchez y Lozano García fueron detenidos, pero una tercera persona se fugó.
El agente del Ministerio Público (MP) a cargo del caso presentó ante el Tribunal de Enjuiciamiento –conformado por las juezas Eva Zúñiga Ortiz, Catalina Ruiz Pacheco y Emma Terán Murillo– a Rosina de la Cruz y a Jesús Adrián Huerta, quienes narraron cómo sucedieron los hechos y reconocieron a los ahora sentenciados así como a varios policías municipales, agentes y peritos estatales.
El Tribunal le abonó a los sentenciados el tiempo que llevan recluidos, desde el 6 de octubre del 2016 y les negó cualquier beneficio preliberacional.
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