Verónica Domínguez
El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— “Estamos trabajando como el Papa nos dijo en su visita. Tenemos la Casa del Migrante para todos, yo les he dicho que todas las parroquias deben ser como una casa para los migrantes, de recibirlos y acogerlos con las cuatro indicaciones que nos ha dado el Papa: acoger, proteger, promover y formar a nuestros hermanos migrantes”, anunció el obispo.
“Estamos viviendo una deshumanización en general, de los migrantes, los niños, mujeres a los pobres, estamos pasando momentos de dureza de corazón, de pérdida de valores, debemos volver a la mirada de nuestros hermanos con amor y misericordia”, mencionó el obispo José Guadalupe Torres.
Con respecto al apoyo que se pide para la Casa del Migrante, comentó que es una gran cantidad de personas que llegan a esta frontera de distintas partes del mundo, y exhorta a la comunidad a seguir ayudando la causa.
“Es una petición del padre Javier Calvillo que repetimos, necesitamos ayuda en especie sobre todo en víveres o en economía para administrar. Son muchos, cada vez son más tanto los que quieren pasar como los que regresan”, comentó el obispo.
Agregó que está en favor de las actividades que se realizan en el muro en donde las familias se reúnen de manera momentánea.
“Es un clamor muy importante, estamos a favor del abrazo, que nadie nos separa. Hay que unirnos, abrazarnos, que nos comprometamos a darnos un abrazo por el amor fraterno”, añadió el líder de la Diócesis de Juárez.
En cuanto a los centroamericanos que se desplazan por el contexto de violencia que hay en su país, dijo que “nos hace falta ver al migrante como personas, como hermanos, no como obstáculos ni como enemigos”.
El obispo también comentó que se debe asegurar la vida de los migrantes de ambos países y cuidarlos durante el trayecto que transiten por cualquier lugar.
El obispo de la Diócesis de Ciudad Juárez comentó que es muy triste que los polleros dejen a los migrantes a la deriva en su camino.
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