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El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— Tras el homicidio de Dan Gerardo Fonseca Torres, jefe de Asuntos Internos de la Fiscalía en la Zona Norte, ocurrido el pasado 9 de agosto en esta ciudad, surgieron nuevas amenazas relacionadas con una investigación que encabezaba un mes antes de ser asesinado, confirmaron fuentes del Poder Judicial.
En seguimiento al caso heredado por Fonseca, para que se castigara a los responsables del desvío de dinero público destinado a la compra de gasolina para patrullas de la Comisión Estatal de Seguridad, una agente del Ministerio Público (MP) cuyo nombre se omite, quien se aprestaba a presentar los cargos ante el juez derivados de esa investigación, fue amenazada al igual que Fonseca en vida, según se informó extraoficialmente.
El acusado por el presunto peculado en contra del Gobierno del Estado es el inspector de la Policía Bancaria de la Comisión Estatal de Seguridad (CES), Refugio Delgado Aguirre, quien se presentó a una audiencia el pasado lunes.
Según los datos obtenidos en tribunales, la MP, dijo a sus superiores haber sido amenazada para no presentar la acusación referente a esa carpeta de investigación que le había sido asignada tras la muerte de Fonseca.
De última hora fue asignado el expediente a otro de sus compañeros, quien al no conocer detalles de la investigación en mención mostró incapacidad ante el juez para formular la acusación contra el mando del CES y se desistió de inculparlo el pasado lunes 8 de octubre durante una audiencia de control.
El Inspector del CES no logró ser acusado en esta audiencia y se encuentra en libertad. El juez, Juan Melitón Hernández, tras aceptar el desistimiento dijo que el MP tiene el monopolio para ejercer acción penal y es facultad de esa institución decidir en qué momento formula cargos legales.
Delgado Aguirre fue suspendido por Dan Gerardo Fonseca Torres durante el mes de julio pasado y no ha logrado regresar a servicio, según confirmó personal de Fiscalía.
Se conoció que el jefe de Asuntos Internos recibió amenazas durante la investigación que inició al descubrir que el dinero destinado a la gasolina de las patrullas oficiales de la CES se estaba quedando en manos de particulares.
El señalamiento que se plantearía en la audiencia del lunes es que del 15 de junio al 7 de julio de este año, en su calidad de servidor público, Refugio Delgado Aguirre dispuso para sí dinero en efectivo que se depositaba en tarjetas denominadas “ticked card”, destinadas para la recarga de combustible de las unidades oficiales, según el MP.
Dan Gerardo Fonseca fue asesinado el 9 de agosto al concluir esta investigación que forma parte de las hipótesis de su muerte, según se conoció.
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