Javier Olmos
El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— A pesar de haber sido nombrado jefe del Departamento de Transporte Público hace casi un mes, el panista Jorge Ostos Castillo no ha asumido de lleno en esa dependencia y tampoco como “asesor técnico” en la oficina de Gobernación, mientras el desorden en el transporte público de la ciudad sigue imperando.
El funcionario estatal ha dividido su tiempo entre “tomar nota de lo que sucede” en una área y hacer “todo lo que se ofrezca” en la otra desde que fue nombrado como director de Transporte Público en la Zona Norte el pasado 4 de septiembre.
Aun así sigue cobrando intacto su salario, que supera los 30 mil pesos mensuales.
Esa dependencia, sobre la cual pesa la responsabilidad de dirigir el transporte público de la ciudad, ha permanecido acéfala desde hace casi cinco meses, cuando renunció al cargo de director Víctor Estala Banda tras tener conflictos con algunos concesionarios.
En su lugar fue asignado en mayo como jefe interino Mario Echánove, quien admitió que sólo podía acudir entre tres y cuatro días por semana a la oficina debido a que es de la ciudad de Chihuahua, en donde al mismo tiempo asume el cargo de director a nivel estatal en la misma dependencia.
Mientras tanto, Ostos sigue teniendo el cargo de asesor técnico en el Departamento de Gobernación, por el que recibe un sueldo neto de 14 mil 664.88 pesos más 15 mil 679 pesos de compensaciones.
Dijo que desde que recibió el nuevo nombramiento va a las oficinas de transporte los lunes, miércoles y viernes, mientras que los martes y jueves se presenta en la de Gobernación, en Pueblito Mexicano.
Ahí hace “todo lo que se ofrezca”, “desde revisión de los expedientes de la nueva licencia de alcoholes, calificar las multas, hacer los horarios de los inspectores, atender a los ciudadanos que tienen dudas, armar cursos de capacitación”, refirió.
Y en transporte, “tomando nota de lo que sucede, checar el estado de la entrega recepción”, expuso.
Mientras la dependencia sigue sin cabeza, en la calle los camiones siguen dando el mismo servicio deficiente y las quejas van al alza.
De acuerdo con personal de la dependencia que habló bajo el anonimato, hay un desorden de quejas interpuestas por usuarios desde que Estala era el titular de esa área.
“Ahora con el proceso de entrega-recepción por el cambio de jefe, nos hemos dado cuenta de que el desorden que hay es mucho mayor. Ha habido mucha gente que no ha hecho su trabajo”, dijo la fuente.
Ostos aceptó entrevistado ayer que en la capacitación ha visto las mismas deficiencias que enfrenta la dependencia en cuanto a la atención al usuario, “camiones muy viejitos”, falta de documentación de los concesionarios y los autobuses que utilizan, y que siguen recorriendo las mismas rutas inadecuadas.
Dijo que va a tomar posesión formal de la dirección de ese departamento el próximo 1 de octubre, en tanto se consigue su reemplazo como asesor técnico en la oficina de Gobernación.
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