Abril Salgado/
El Diario de Juárez
A través de la disciplina militar es como desde hace 35 años la Asociación Cóndor ha buscado incidir en los adolescentes del suroriente y colonias vulnerables de la ciudad, a fin de prevenir que incurran en caminos delictivos, de adicciones o formen parte de pandillas.
Jesús Baca, director del Escuadrón Deportivo Militarizado, explicó que cada año se atienden solicitudes de instituciones que refieren un alto índice de problemática con los menores, basado en estadísticas de la Dirección de Prevención Social de la Secretaría de Seguridad Pública.
“Yo estaba en la Secundaria Altavista en el 90, a mis 13 años pertenecía a una pandilla de la colonia Anapra. Estaba destinado si bien, a terminar la secundaria, o a caer en adicciones, pero la institución logró un cambio en mí al haberme captado y enganchado con las actividades que hacen. Hoy puedo decir que soy una persona de bien, terminé mi licenciatura y tengo una maestría”, narró Baca.
Cambian la vida de miles de adolescentes: Fomenta Asociación Cóndor gusto por la competitividad
Son más de 26 mil adolescentes en Ciudad Juárez que han formado parte de la historia de esta asociación al haber ingresado para recibir talleres de prevención delictiva, formación del carácter, participar en excursiones, actividades deportivas y recreativas, que han ayudado a muchos a enfocar o reivindicar su camino, señaló.
“Yo pienso que si esa institución pudo hacer un cambio en mí, lo puede hacer en cualquier otra persona, tenemos el caso de Daniel Muro, un joven que tenía problemas de conducta y deserción escolar, ahora él forma parte del cuerpo de instructores y se tomó un descanso para terminar su ingeniería”, expuso.
También explicó que a pesar de no guiarse por normas tan rígidas como el Ejército, algunos adolescentes prefieren desertar ya que no están acostumbrados, aunque la gran mayoría que permanece desarrolla un gusto por la competitividad y adquieren un sentido de pertenencia.
“Todos los jóvenes que se meten a pandillas es por eso, por buscar identidad o por tener sentido de pertenencia a algo, entonces de cierta manera el Escuadrón es lo que hace, ocupa el lugar de la pandilla”, mencionó.
Terminado su programa semestral a partir de los 17 años, los menores pueden aspirar a ser auxiliares de instructores, e incluso graduarse como sargentos para atender una unidad al interior de la asociación, o bien, ser talleristas o capacitadores, puntualizó Baca.
En el 2008 Cóndor trabajó en la protocolización del acta constitutiva y se conformaron de manera legal como una Asociación Civil, enfocada en la prevención de delitos, de pandillas y adicciones, modelo que hasta hace tres años, se implementó también en la ciudad de Chihuahua.
Finalmente, informó que la Secretaría de Desarrollo Social aprobó un proyecto donde enseñarán a los adolescentes un taller de artes gráficas de julio a diciembre. Además realizarán otro taller de capacitación para el trabajo que podría iniciar en el mes de agosto y tendría validez ante la Secretaría del Trabajo. (Abril Salgado / El Diario)
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