El Diario de Juárez
2018-05-27
Uno de cada tres niños, niñas y adolescentes que acuden a los Centros de Salud de Ciudad Juárez presentan una deficiente nutrición, revelan datos del Subsistema de Prestación de Servicios de la Secretaría de Salud federal.
De acuerdo con esta información, en lo que va del año estas unidades médicas han checado el estado de nutrición de mil 670 menores, de los que el 33.29 por ciento sufren obesidad, sobrepeso o bajo peso según su Índice de Masa Corporal (IMC).
Sólo mil 114 infantes y adolescentes presentaron un IMC normal.
De la cifra global, 23 tienen bajo peso y 533 sufren sobrepeso y obesidad, indican las estadísticas, que cobran relevancia hoy, Día de la Nutrición. (Fernando Aguilar)
Francisco Ramírez Montañez, secretario ejecutivo del Comité Municipal de Salud de Ciudad Juárez, cree que esta es una cifra elevada que es responsabilidad sobre todo de los padres, madres y tutores de los menores, pues el estado de nutrición en esa etapa depende de ellos.
“Se acostumbra dar alimentos como satisfactores”, señaló.
“Cada vez que el niño está enojado o triste lo tratamos de contentar con alimento. Aún desde la infancia: lo vemos llorar y le ponemos el biberón. Lo que tenemos a la mano, lo más rápido, generalmente es comida chatarra”.
El médico opinó que los adultos que tienen bajo su responsabilidad a niños y adolescentes deben ser conscientes de que una mala nutrición es causante de graves problemas crónicos en el futuro, como diabetes e hipertensión.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explica que la obesidad en los niños, niñas y adolescentes tiene que ver con la deficiente alimentación que tienen y la poca o nula actividad física que realizan.
“Debido a los videojuegos, televisión, tablets, celulares y computadoras, los niños pasan varias horas sentados, sin gastar energía que al no ser utilizada se convierte en grasa y se acumula en el organismo generando sobrepeso y obesidad”, indica.
El problema es que la obesidad en este grupo de la población puede ser el principio de enfermedades “consideradas de adultos”, como diabetes mellitus, problemas en pies y espalda, trastornos hormonales, hipertensión arterial, várices y cáncer, señala el Seguro Social.
El sobrepeso y la obesidad en estas etapas del desarrollo humano también pueden ocasionar un daño en la autoestima, lo que a su vez puede tener consecuencias como inseguridad o dificultad para establecer relaciones interpersonales, ansiedad, depresión y pensamientos negativos, advierte la dependencia de salud. (Fernando Aguilar/El Diario)
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