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El Diario de Juárez
Quien asesinó el pasado sábado a una pareja dentro de su domicilio en la colonia Parajes de San Isidro, habría sido la misma persona que reportó de manera anónima que en la vivienda había un niño abandonado, según las primeras investigaciones del doble homicidio.
Al menor, huérfano de ambos padres y con apenas meses de nacido, le llovieron intenciones de adopción por parte de agentes operativos, administrativos, de Trabajo Social y de Oficialía Jurídica y Barandilla, de la SSPM, por lo conmovedor de la tragedia. Sin embargo, ya fue entregado a sus familiares.
Ignoraban vecinos que bebé estaba solo
La versión de que fue el homicida quien reportó al niño abandonado cobró fuerza porque según los investigadores, cuando los policías preventivos llegaron, los vecinos desconocían que la pareja identificada como Hernán Arnoldo Parra Sánchez, de 19 años y Priscila Janeth Alvarado Talamantes, de 18, había sido asesinada en su propia casa.
Agentes entrevistados aseguraron que sólo se presentó un reporte telefónico al 911 alertando de un bebe abandonado en dicho domicilio. Nadie llamó a emergencias para denunciar el asesinato de la pareja, ni haber escuchado disparos, aseguraron.
La versión extraoficial cita que los primeros en llegar fueron los policías municipales de la unidad 510, quienes al asomarse por una de las ventanas del domicilio, ubicado en calles Volcán Aragón y Popocatépetl, confirmaron que el bebé estaba llorando en una recámara y nadie respondió a la puerta.
Preguntaron entonces a los vecinos del sector y pero no estaban enterados de lo ocurrido, confirmó uno de los primeros respondientes.
Los oficiales decidieron entrar al ver que la puerta estaba abierta, y fue cuando descubrieron los cadáveres de la pareja, presuntos padres del niño, los cuales tenían heridas de bala, según narran.
La mujer policía aseguró al menor y activó la alarma. En tanto llegaron los refuerzos, la agente cambió al bebé de pañal, ya que estaba sucio, dijeron los agentes.
Los agentes señalan que al menor huérfano de ambos padres le llovieron intenciones de adopción por parte del personal de Seguridad Pública Municipal, pues quedaron conmovidos ante la tragedia.
“Es que su mirada era demasiado tierna, como que quería saber qué estaba ocurriendo, y quienes eran esas personas (los policías)”, dijo un oficial preventivo que pidió la reserva de su identidad por cuestión de políticas internas.
Ayer, Jorge Nava López, fiscal en la Zona Norte, dio a conocer que se tenían pistas firmes para dar con el responsable del doble crimen, y que el menor fue entregado a sus familiares por parte del Departamento de Atención a Víctimas de la dependencia ministerial. (Staff / El Diario)