Javier Olmos/
El Diario
Después de cumplir la mayoría de edad, Iván Eduardo Baray llegaba a los 18 años malgastando el tiempo hasta que para conseguir un empleo se le requirió la cartilla militar liberada y tuvo que hacer su Servicio Militar Nacional, un trámite que en el proceso le cambió la vida.
“Fue una experiencia muy bonita pero muy dura porque hubo mucha disciplina. Veníamos con una mentalidad como civil, acostumbrados a malgastar el tiempo y aquí lo valoras, porque con 10 minutos que te den libres, los valoras mucho”, dijo ayer.
Iván Eduardo, proveniente del municipio de Cuauhtémoc, Chihuahua, forma parte de la generación de 2 mil 586 conscriptos de la clase “1999”, anticipados y remisos, que ayer expresaron su juramento para proteger el lábaro patrio en un evento realizado en la Guarnición Militar de esta plaza.
De ese número de jóvenes, 2 mil 110 se encuentran cumpliendo su servicio militar nacional en situación de disponibilidad y 476 en situación de encuadrados junto con cuatro mujeres voluntarias en el centro de adiestramiento del Noveno Regimiento de Caballería Motorizado de este campo militar.
La ceremonia se realizó en el marco de la conmemoración de la Batalla de Puebla del 5 de Mayo y participaron, además de autoridades militares, el alcalde de la ciudad Armando Cabada Alvídrez.
“Al término de la capacitación, les habrán inculcado habilidades y valores que les permitirán ser mejores ciudadanos, mexicanos íntegros, responsables, respetuosos de los derechos humanos y de la igualdad de género”, destacó la Secretaría de la Defensa Nacional a través de la comandancia de la Quinta Zona Militar en esta ciudad.
El objetivo del SMN es también fortalecer su respeto por los símbolos patrios e incrementar su identidad y conciencia nacionales, así como participar en el proceso productivo del país, responder al llamado de la patria en caso de requerirse para coadyuvar en la seguridad y la defensa de la nación.
Además de contribuir en el auxilio a la población civil en caso de necesidades públicas o desastres.
Iván Eduardo dijo que cuando cumplió los 18 años no tuvo la oportunidad de hacer el servicio los sábados, pero ahora que cuenta con su cartilla militar liberada se incorporará a una corporación policiaca de esta ciudad.
“Nos enseñan muchos valores como el patriotismo, honor, lealtad hacia la patria, a la sociedad. La verdad esto te cambia la vida”, expresó.
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