J. Olivas/J. Olmos/
El Diario
La Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) guardó silencio en torno al incendio que consumió el depósito de materiales reciclables en la colonia Granjas de Santa Elena el pasado miércoles y generó una contingencia ambiental.
La delegada de esta dependencia, Laura Ulate, fue requerida por diversos medios de comunicación, pero declinó emitir información. El Diario intentó contactarle vía telefónica, pero la llamada fue conducida al buzón.
El titular de Desarrollo Urbano y Ecología del Estado, Salvador Barragán Flores, tampoco atendió las solicitudes de información para conocer la intervención que tiene su dependencia en la revisión a la empresa siniestrada.
A ambas dependencias (Profepa y Desarrollo Urbano y Ecología) corresponde verificar el cumplimiento de las normas ecológicas de este tipo de negocios, así como sancionar su omisión.
Tampoco Semarnat interviene
La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) del Gobierno federal reportó también estar al margen de las investigaciones en torno al incendio registrado el miércoles.
Personal de la dependencia federal informó que saben que “al parecer” no se incendiaron residuos peligrosos, por lo que el caso está fuera de su competencia.
“La Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) es la que se está haciendo cargo de las investigaciones”, dijo ayer un representante de la Semarnat.
En todo caso, agregó, se revisará más adelante con dependencias del Municipio si los propietarios del lugar que se quemó contaban con todas las autorizaciones por medio de la ley.
“Sin embargo nosotros no inspeccionamos, los permisos se dan solamente si se trata de residuos peligrosos”, añadió el funcionario.
El incendio puso en alerta ambiental la comunidad fronteriza a lo largo del miércoles pasado, ya que una enorme torre de humo ‘tapizó’ el cielo durante varias horas.