Salvador Castro/
El Diario de Juárez
La devoción de la comunidad católica se desbordó la noche de Viernes Santo cuando alrededor de 200 personas, entre las cuales se encontraban hombres, mujeres, jóvenes y niños, participaron en la Procesión del Silencio recorriendo las calles del fraccionamiento Juárez Nuevo.
Los devotos partieron minutos después de las 9 de la noche de la Iglesia Doce Apóstoles de las calles Toronja Roja y Salgado, custodiados por un grupo de jóvenes que representaban soldados romanos y otros más que vestían con ropa blanca, capuchas y llevaban antorchas encendidas.
Los participantes, entre las cuales se encontraban mujeres vestidas de negro, portaban velas en las manos, para alumbrar su camino.
La procesión representa el camino que siguió Jesús hacia el calvario, por lo que los devotos guardaron silencio, ya que simboliza la caminata hacia la crucifixión.
Durante el recorrido Recrearon el pasaje bíblico en el que Jesús exclama: “en tus manos encamiendo mi espíritu”, y es cuando se termina la procesión y se hace una representación para darle el pésame a la Virgen, quien lloró por la muerte de su hijo.