Juan de Dios Olivas/
El Diario de Juárez
Propietarios de negocios que expenden bebidas embriagantes pidieron ayer al Departamento de Gobernación flexibilizar la disposición que prohíbe a su personal consumir alcohol en los mismos establecimientos.
Lo anterior en tanto se realiza la petición formal al Congreso del Estado para que modifique esa norma que incluyó en la nueva Ley de Alcoholes que entró en vigor el primero de enero.
Sergio Arturo Salgado y Larisa Terrova, a nombre de los negocios de este ramo, explicaron que la disposición ahuyenta a los clientes de bares y tiene un efecto sobre el turismo, lo que afectará a los establecimientos y miles de familias que dependen de ellos.
“Afecta la economía de los negocios y empleados y el turismo tendrá también afectaciones”, dijo Salgado.
Los comerciantes firmaron en las oficinas de la Unidad Administrativa José María Morelos un documento que entregaron al Departamento de Gobernación donde formalizan su petición.
La disposición busca proteger los derechos de la mujer, pero es ambigua en su aplicación y no genera otros mecanismos que realmente garanticen la protección como lo son la implementación de guarderías, señalaron.
Esta se encuentra en su artículo 33 fracción XXI que prohíbe a empleados de estos negocios consumir alcohol en los mismos lugares, en horario de trabajo y está vigente desde enero, pero que todavía no ha derivado en sanciones para ningún negocio debido a que Gobernación carece del reglamento para aplicar la disposición, alcoholímetros y médicos que sometan a revisión a los empleados, señaló en una entrevista anterior el jefe de Gobernación, Ignacio Castro Velázquez.
En Juárez hay alrededor de mil 800 bares y restaurantes-bar que expenden bebidas alcohólicas y emplean a cerca de 20 mil personas. (Juan de Dios Olivas)
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