Staff/
El Diario de Juárez
Dos hermanos fueron detenidos y llevados ante un Tribunal de Control acusados por el homicidio de un chofer de transporte de personal.
A Ricardo y Alfonso Noé E. Ch. se les impuso la medida cautelar de prisión preventiva por el homicidio de Delfino Sustáita García.
Al inicio de la audiencia que se realizó ayer en la quinta sala de los juzgados locales, antes de que el fiscal formulara cargos, el abogado defensor de los Estrada Chávez le pidió a la jueza que realizara un análisis de la detención aunque contra sus defendidos se ejecutó una orden de aprehensión y la diligencia tenía por objeto únicamente formularles cargos legales, argumentando que hubo violaciones a derechos humanos.
El litigante expuso que los hermanos fueron detenidos por estatales la mañana del pasado 17 de febrero, presuntamente porque se estaba peleaban y se resistieron al arresto, después estuvieron retenidos 48 horas en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE).
El lunes pasado los presentaron ante un Tribunal de Control diverso al de ayer acusados del ilícito de resistencia de particulares y aunque la detención se declaró legal, el MP ya no les formuló cargos legales por lo que el Tribunal ordenó que fueran puestos en libertad.
Sin embargo, al salir del Cereso 3 de Ciudad Juárez Alfonso Noé y Ricardo volvieron a ser arrestados por el ilícito de resistencia de particulares y estuvieron retenidos hasta la noche del miércoles pasado. El abogado defensor dijo que el MP retuvo ilegalmente a los Estrada hasta que se obtuvo la orden de aprehensión por el homicidio de Delfino Sustáita.
Después de escuchar al defensor, la jueza consideró que el arresto sí fue legal aduciendo que el MP ya contaba con una orden de aprehensión y dijo que la orden de captura de puede cumplimentar en cualquier lugar.
Casi al mismo tiempo a la audiencia de Control de Detención de ambos hermanos, la familia del conductor asesinado desconocía la detención y consignación de los supuestos asesinos del padre de familia, por lo que reprobaron que el Ministerio Público omitiera informar a las víctimas.
“Nosotros vamos a esperar en Dios. Si son ellos (los asesinos) que paguen según la resolución del juez, porque si quedan libres y si son ellos seguirán haciendo más daño del que ya han ocasionado”, dijo Reyna Montoya, nuera de Delfino.
El fiscal en el Distrito Zona Norte, Jorge Arnaldo Nava López, dio a conocer que en el crimen del chofer participó una banda dedicada al robo de camiones de transporte que opera en la frontera para luego venderlos en Sonora.
“Hemos seguido esta línea de investigación, ya se tiene detenidos a quienes tienen la probable responsabilidad en este hecho, ya se ha ejecutado la orden de aprehensión por los delito de robo con penalidad agravada y surge el homicidio como delito emergente”, dijo Nava.
Dijo que los hermanos cuentan con varias carpetas de investigación por robo con esta modalidad violenta. Delfino los reconoce y lo golpean, muere por un traumatismo craneoencefálico secundario a la asfixia, agregó el fiscal.
El conductor asesinado desapareció el 14 de febrero y su cuerpo localizado la madrugada del domingo, luego de cuatro días de rastreo permanente realizado por la familia de la víctima.
La investigación realizada hasta el momento establece que el conductor prestó el servicio de traslado del personal a la maquiladora BRP planta 1.
Al dejar al último pasajero en las calles Hipocampo y Pulpo, en la colonia Puerto Anapra, los hermanos abordaron por la fuerza el camión de la marca Internacional, modelo 2006, lo despojaron de la unidad y lo estrangularon, para luego golpearlo en la cabeza.
“La causa de muerte fue traumatismo craneoencefálico y asfixia por estrangulamiento”, dijo Nava López.
Los probables ladrones arrojaron el cadáver en el Libramiento Samalayuca y San Jerónimo, que fue hallado cuatro días después.
Los investigadores refirieron que al día siguiente los hermanos trataron de sacar la unidad del estado, pero lo abandonaron a la altura del kilómetro 073+800 de la carretera (1120) federal conocida como “a Casas Grandes” en el tramo Janos - Agua Prieta, en los límites del estado de Sonora. (Staff / El Diario)