Javier Olmos/
El Diario de Juárez
Defensores de los derechos de los migrantes prevén que este año sea igual que el 2017 en cuanto a deportaciones de mexicanos, aún y cuando las políticas antiinmigrantes del presidente del país vecino siguen siendo hostiles.
El sacerdote Javier Calvillo, director de la Casa del Migrante en esta ciudad, señaló que han sido “puras palabras” las advertencias de Donald Trump sobre expulsiones masivas de indocumentados. “Este será un año tranquilo”, avizoró.
En Estados Unidos, el Departamento de Justicia prepara un sistema que medirá el desempeño de los jueces de inmigración, como aliciente para acelerar los procesos de más de 634 mil casos estancados a nivel nacional.
Esa situación ha consternado a jueces paseños que temen que se usen cuotas numéricas para medir el desempeño y que afecten el debido proceso y desaten fallos y deportaciones injustas, publicó ayer El Diario de El Paso.
Cuestionado al respecto, Calvillo afirmó que “no se sabe bien cuál es el plan de este señor (Trump), pero durante el 2017 no se vio ningún efecto. Sus advertencias no han tenido eco hasta el momento”.
El año pasado fueron deportados por esta frontera mil 813 migrantes, una cifra que es baja en comparación con 2014 y 2015, según datos de la Dirección del Migrante del Municipio.
El reporte municipal establece que en 2014 apoyaron a 4 mil 488 mexicanos que repatriados por esta frontera, mientras en 2015 el número llegó a 3 mil 847.
El representante de la Casa del Migrante dijo que el número de mexicanos y centroamericanos que llegan a su albergue se ha mantenido en los últimos meses.
En 2017 la Casa del Migrante recibió alrededor de 8 mil personas, la mayoría con miras a cruzar a EU. (Javier Olmos)