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Siguen las celebraciones para los fieles católicos

Karen Cano/
El Diario de Juárez

2018-01-01

Mientras que para la mayoría de las personas las fiestas navideñas han culminado, para los fieles católicos apenas se encuentran a la mitad y siguen preparándose para las celebraciones próximas: el Día de Reyes y el Día de la Candelaria.
“Primero celebramos que el Niños Dios va a nacer, y son las posadas. Luego festejamos que ya nació y su presentación al templo; toda esta temporada debe girar en torno a Él”, relató Irma Contreras de Sosa.
Ella es un ama de casa que durante los últimos 40 años se ha dedicado a vestir, arropar y rezarle al Niño Dios en compañía de su familia.
Esto refleja las tradiciones que le fueron inculcadas desde niña, y que a su ver, son la mejor manera de mantener a las familias unidas.
Los hijos de Irma y su esposo José Sosa también han crecido con las tradiciones.
“Cuando mi mamá vivía, levantábamos al Niño Dios el Día de Reyes, pero hay ocasiones que lo hacemos el 2 de febrero, que es lo tradicional, y es un recuerdo de cuando lo presentaron la Virgen María y José en el templo, por eso se viste al niño”, explicó Irma.
Lo anterior porque las mamás, tras 40 días con el bebé, lo presentaban con el sacerdote y lo circundaban.
“Al llevarlo al templo lo visto lo más bonito que puedo, por lo que le hacemos sus ropones y zapatos. Ese día que levantamos al niño lo hacemos en familia, rezamos el santo rosario y entre misterio y misterio se va vistiendo al niño con su pañal, gorrito, fondo y zapatos”, dijo.
Esto lo hacen niños o adolescentes, debido a que reflejan la pureza de José y María cuando recibieron al niño Jesús.
Luego pasan a adorarlo y todos toman una colación. En este caso, lo harán el próximo 2 de febrero, el Día de la Candelaria, sin embargo, lo más cercano es el Día de Reyes.
Este se conmemorara el próximo sábado 6 de enero, en honor a los reyes magos que fueron a adorar al niño recién nacido y a llevarle regalos.
“Al comer la rosca salen los muñequitos. Quienes lo encuentran compran la comida para el día en que levantamos al niño, sin embargo, los padrinos son aparte y son los que lo visten”, dijo Irma.
Es así como actualmente cuenta con una colección de ropones, confeccionados por ella, así como nacimientos de todo tipo.
Para ella, lo mejor de la celebración es la unión de su familia, que preserva las tradiciones.
“Yo quisiera que todas las personas tomaran estas tradiciones, son muy hermosas y ayudan mucho a edificar a las familias y unirlas y continuar con nuestra tradición de festejar al Niño Dios, independientemente de las fiestas, celebrarlo en familia”, dijo. (Karen Cano / El Diario)

kcano@redaccion.diario.com.mx

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