Karen Cano/
El Diario de Juárez
Este 2017 la violencia logró ingresar a al menos 15 escuelas de la localidad, en forma de vandalismo, armas, robos, tiroteos y hasta un asesinato.
Lo anterior, representó una situación que puso en alarma a las autoridades educativas de todos los niveles, las cuales han estado promoviendo actividades lúdicas y simulacros de emergencia para poder mediar la situación.
“Por parte de Educación estamos redoblando esfuerzos. Tenemos reuniones con directivos de clase para revisar protocolos, y estamos trabajando en conjunto con la Subsecretaría de Desarrollo Social en la atención emocional de los alumnos de diferentes niveles”, dijo Judith Soto Moreno, subsecretaria de Educación y Deporte en la Zona Norte.
Durante el año que recién acabó, se registraron dos escuelas vandalizadas, en las cuales personas ajenas al recinto ingresaron y violentaron el área con pintas groseras y hasta satánicas, así como con la destrucción del mobiliario.
El martes 14 de octubre emblemas referentes a prácticas de ocultismo y un mensaje amenazante fueron pintados a la entrada de la Escuela Primaria Norahua, en la colonia Los Alcaldes, propiciando alerta entre padres de familia, estudiantes y vecinos.
Con pintura roja y sobre la banqueta, al pie de la puerta que da acceso a los estudiantes, alguien escribió “Niños Muertos”, acompañado de un pentagrama y dos cruces invertidas.
Esto mientras que el lunes 23 de octubre, vándalos ingresaron a la Escuela Primaria Federal Independencia para escribir consignas vulgares en sus paredes y provocar diversos destrozos.
“Es una lástima que las personas aún no comprendan que las escuelas son de todos y todos debemos cuidarlas”, dijo Soto Moreno, quien hizo un llamado al respeto.
Lo anterior también en respuesta a los robos que sufrieron al menos cinco escuelas de la localidad. Algunas de ellas incluso estaban vigiladas con cámaras de seguridad.
Tal fue el caso de la Escuela Primaria Sentimientos de la Nación, en donde el miércoles 11 de octubre, ladrones se llevaron 16 computadoras, cuyo valor en conjunto estaba estimado en 96 mil pesos.
Lo mismo pasó en las Escuelas Secundarias Técnicas 33 y 47, ubicadas en la misma zona educativa, las cuales fueron robadas prácticamente de la misma forma y al mismo tiempo la madrugada del domingo 11 de junio.
En ambas escuelas los ladrones se llevaron las mismas cosas: tres proyectores de video que los profesores utilizan para dar sus clases, cada uno valuado en 7 mil pesos.
Al día siguiente de ese hecho, se dio a conocer el caso del Jardín de Niños Revolución, en la calle Joaquín Terrazas, donde habían robado en cuatro ocasiones seguidas en la misma semana.
Mientras que la Escuela Primaria Federico de la Vega, a finales de marzo tuvo una racha de cinco robos consecutivos. Luego, para la primera semana de noviembre, volvieron a sufrir otra racha de tres robos consecutivos.
En lo que respecta al ingreso de armas de fuego a los planteles, en todo el año trascendieron cuatro casos, de los cuales en dos los estudiantes llevaban armas reales.
La última vez ocurrió el pasado jueves 16 de noviembre, cuando autoridades educativas detectaron a un adolescente portando un arma de fuego al interior de la Escuela Secundaria Estatal 3002, ubicada en la calle Plan de Ayala.
Al principio, el hecho fue dado a conocer por los padres de familia, quienes informaron que los maestros descubrieron la situación luego de que el alumno que traía el arma apuntó a otro durante una riña.
Esto fue desmentido después por los directivos, quienes señalaron que el adolescente llevaba el arma descargada, y que le fue detectada en la mochila.
Anterior a eso, el miércoles 11 de octubre un estudiante del Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios (Cbtis) 128 ingresó a la escuela con un arma de postas; y el 21 de septiembre, un menor que portaba en la mochila una pistola de este tipo también ingresó a la Escuela Primaria Juárez y Reforma con ella.
Por otro lado, en mayo, un estudiante de la Preparatoria Luis Urías, en la zona Centro, fue asegurado por la Policía debido a que acudió armado al plantel.
“Es importante prevenir que estos artefactos entren a las escuelas. Para nosotros estas son alertas y focos rojos de atención, por esto estamos haciendo intervenciones en las escuelas, para crearles conciencia”, dijo Esteban Martínez, director de Prevención Social de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal.
El viernes 16 de noviembre el Colegio de Bachilleres plantel 6 tenía contemplado realizar un simulacro de balacera, el cual fue cancelado a último momento, presuntamente porque padres y madres de familia se opusieron.
Lo anterior pese a que en el año, al menos tres escuelas tuvieron que suspender clases al registrarse balaceras afuera de sus instalaciones.
En una de ellas, el sicario logró ingresar al patio de juegos, en donde se escondía la persona que buscaba agredir, dándole muerte frente a estudiantes de la clase de educación física.
El viernes 21 de septiembre, un hombre armado se coló en las instalaciones de la Escuela Primaria Ernesto Guevara, le pidió a señas al profesor de educación física que metiera a los alumnos al salón, éste corrió a resguardarlos y luego se tiró al suelo escondido en una jardinera.
Enseguida, a unos metros, un varón que buscaba refugiarse de su victimario y que también había ingresado por una barda perimetral de la escuela en construcción, fue ultimado a balazos.
“No podemos tener a nuestros niños en una burbuja, vivimos en una ciudad violenta y hay que aceptarlo y sobre todo hablar con nuestros hijos sobre cómo proteger su integridad”, dijo Benito Arellano, quien hasta entonces era el presidente de la Asociación Municipal de Padres de Familia.
En cifras
Se reportaron robos en 5 planteles mientras que 2 más fueron vandalizados
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