Sandra Rodríguez/
El Diario de Juárez
Cientos de miles de menores de edad crecen en medio de la violencia de esta frontera sin que haya infraestructura para su cuidado.
Datos de la Red por la Infancia indican que sólo ocho de cada 100 mujeres empleadas en el sector formal cuentan con acceso a algún servicio de guardería para sus hijos, y que este tipo de instalaciones proveen sólo 14 mil 800 espacios para más de 355 mil menores de cero a cuatro años.
También se indica que de los 73 Centros de Bienestar Infantil que había en 2013 para el cuidado de niños de hasta 12 años, sólo quedan 45.
“Las madres y padres de familia están volcados en el trabajo; viven al día y pasan, en promedio, entre ocho y 12 horas fuera de la casa para ir al trabajo”, explicó Ana Margarita Luna Flores, integrante de la Red por la Infancia.
“En ese período de tiempo, niños y niñas quedan al cuidado de otras personas, como los vecinos, o se quedan solos, encerraditos. Ese es un punto importante, porque no existe en la ciudad una política de cuidado infantil, después de tantos años que como Red hacíamos ese reclamo, después de estos años no se ha atendido ni a la mitad”, agregó.
Luna Flores fue entrevistada luego de que, en la madrugada del pasado miércoles, tres niñas hermanas fueran atacadas a golpes y dos de ellas también sexualmente en el interior de su vivienda, ubicada en la calle Toro, de la colonia Ampliación Felipe Ángeles, al norponiente de Juárez.
Las menores tienen 10, 11 y 12 años; ésta última, fue además asesinada por estrangulamiento.
La información preliminar indica que los padres de las víctimas no se encontraban en el interior de la vivienda en el momento del ataque, sin que se haya establecido de manera oficial si estaban o no trabajando.
El caso, sin embargo, de acuerdo con defensoras de derechos humanos, expone la vulnerabilidad en la que crecen miles de menores en esta frontera, donde se combinan la falta de infraestructura para su cuidado con un alto nivel de marginación económica y, también, de extrema violencia.
“Estos hechos de barbarie reflejan cómo se ha agravado la situación de violencia contra las mujeres en esta frontera, ya que sólo en el mes de noviembre fueron asesinadas nueve mujeres y en lo que va de 2017 suman 83 casos de asesinatos de mujeres”, advirtió la Red Mesa de Mujeres en un comunicado.
“Chihuahua en el 2015 ocupó el segundo lugar de mayor índice en la tasa de asesinatos de mujeres, rebasado sólo por el estado de Guerrero. Actualmente ocupa a nivel nacional el segundo lugar en violencia sexual contra las mujeres y el cuarto lugar de violencia familiar”, agregó el texto.
El ataque contra las tres hermanitas ocurre en un contexto de aumento generalizado de la violencia en esta frontera —de un 87.5 por ciento hasta septiembre pasado— pero que sido particularmente agudo contra los menores de edad: 31 casos en lo que va del año; es decir, casi cuatro veces más que los ocho registrados el año pasado y el doble de los de 2015, de acuerdo con la Fiscalía General del Estado.
Datos de la Red por la Infancia agregan que al menos ocho casos han ocurrido en el interior de los hogares y al menos cinco han sido a manos de los padrastros de los infantes.
En la unidad de Violencia Familiar de la Fiscalía Especializada de la Mujer, por separado, se han acumulado 24 mil 441 carpetas de investigación desde 2012, o un promedio de más de cuatro mil 88 por año.
“Lo que vemos es que las condiciones son cada vez más violentas y hay menos brechas para poder salir adelante; los niveles de estrés suben más, los niveles de enojo suben más”, comentó Luna.
“Decíamos en 2008, cuando despunta la violencia, que todos estos jóvenes y estos niños, que si no van a recibir una atención psicosocial, esto se le va a cobrar a la población, y se lo están cobrando a los más pequeños; son muchos factores pero los niveles de estrés están por los cielos, la impunidad. Es la punta de la pirámide de una problemática de muchos años”, agregó Luna. (Sandra Rodríguez)
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