Fernando Aguilar/
El Diario de Juárez
Por precaución y en apego al protocolo establecido, las niñas de 10 y 11 años que fueron agredidas sexualmente reciben tratamiento antirretroviral contra el VIH, informó Ramón Murrieta González, director de la Jurisdicción Sanitaria II de la Secretaría de Salud.
El funcionario médico dijo que, como todas las violaciones reportadas ante la Fiscalía General del Estado (FGE), la de las niñas puso en acción un “código azul” que moviliza a varias instituciones.
“Se les inició el tratamiento, se les inició inmediatamente en cuanto tuvimos conocimiento del caso. Fueron revisadas en el Hospital Infantil y ahí se les proporcionó inmediatamente el tratamiento”, comentó.
De acuerdo con Murrieta González, como parte de la atención, un médico forense las evaluó para determinar las lesiones que presentaban y tomar muestras biológicas.
Independientemente de si se conoce o no el estado serológico del agresor, administrar fármacos antirretrovirales después de un ataque sexual dentro de las primeras 72 horas es una práctica obligatoria que se conoce como Profilaxis Post Exposición (PEP),
Esta medicación minimiza los riesgos de que el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) se desarrolle en el cuerpo, explican médicos.
Se utiliza durante todo un mes después de que se presentan violaciones y cuando el personal sanitario sufre accidentes con agujas u objetos punzocortantes, dijo Juan Carlos Medel Cabrera, representante local del Sistema Nacional de Promoción y Capacitación en Salud Sexual (Sisex) AC.
“En el Centro de Justicia para la Mujer cualquier caso que llega con agresión sexual inmediatamente se les inicia el tratamiento”, dio a conocer Murrieta González.
Estas acciones se suman a las que la Secretaría de Desarrollo Social activó en la colonia Ampliación Felipe Ángeles, escenario de los hechos, como parte de su Protocolo de Acompañamiento Psicosocial ante Situaciones de Tragedia o Violencia Extrema.
Como parte de este programa, un equipo de terapeutas trabaja con la familia de las víctimas y con ellas, así como con sus vecinos y compañeros de escuela.
La agresión causó gran conmoción en la colonia y en la ciudad; tanto, que distintos sectores como organizaciones protectoras de la infancia y de mujeres exigieron justicia y un pronto castigo para los responsables.
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