Karen Cano/
El Diario de Juárez
Estructuras del paso subterráneo instaladas en el Centro Histórico de la ciudad, se encuentran asoladas por el vandalismo, descuido y robo realizado por parte de los usuarios.
A través de un recorrido realizado por este medio, se pudo apreciar que en el caso se encuentra lleno de pintas y basura.
En el pasillo ubicado a desnivel de la avenida fueron construidos cuatro módulos en los que se tenía la intención de posicionar a comerciantes del área; sin embargo, esto nunca se realizó y actualmente estos espacios fungen como mingitorios públicos y clandestinos.
“Hasta los mismos policías se bajan a orinar, cuando es que vienen a vigilar porque no vienen siempre”, dijo uno de los vendedores del lugar, quien prefirió la reserva de su identidad.
La estructura está diseñada para que los peatones puedan pasar de un lado a otro por debajo de la avenida Francisco Villa, cuando el tren se atraviesa en su cruce con 16 de Septiembre.
El acceso al túnel cuenta con escaleras y rampas; por dentro se puede observar grafiti y marcas de labial en las paredes, charcos de orina que despiden aromas nauseabundos y cámaras de seguridad que al parecer están fuera de uso, según comentan los mismos vendedores.
“El problema es como a las 6 de la tarde, son muchas las personas que pasan por aquí, principalmente estudiantes”, dijo el mismo vendedor.
Otros mercaderes de la zona coincidieron en que, además, el paso es inseguro una vez que oscurece debido a que continuamente se sabe de personas que son asaltadas o agredidas al utilizarlo.
El túnel terminó de construirse a mediados del año pasado y costó 16 millones de pesos, para llevar a cabo el desarrollo de los 140 metros que lo comprenden, informaron autoridades en su momento.
La obra corrió a cargo de Ferromex y el Gobierno Federal, para dar circulación peatonal por debajo de las vías del ferrocarril.
Por otro lado, el paso vehicular inferior de la avenida 16 de Septiembre, que inicia en su cruce con la avenida Lerdo y culmina en su cruce con la Melchor Ocampo, carece de extintores desde hace un mes.
La razón es que fueron comprados y colocados dos veces, y en ambas ocasiones se los robaron.
Lo anterior fue informado por el director de Protección Civil del Municipio, Efrén Matamoros.
“Los colocamos una vez y los robaron. Los repusimos y los volvieron a robar. La gente no los respetó y estamos viendo la manera de que se incremente la vigilancia”, dijo.
Indicó que estos artefactos son imprescindibles en el sitio debido a la condición del mismo, pues en caso de un accidente vehicular la posibilidad de un incendio alta y la necesidad de sofocarlo es apremiante y se requiere acciones inmediatas.
Para el interior de esta estructura, se contaban con seis extinguidores, cada uno costaba unos 200 dólares (3 mil 784 pesos, cotización actual). Después, al ser robados, se repusieron y se consiguieron otros que costaban alrededor de 600 pesos; estos fueron robados hace un mes.
kcano@redaccion.diario.com.mx
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