Javier Olmos/
El Diario de Juárez
Las mujeres del suroriente de la ciudad están reflejando un fenómeno de problemas emocionales debido al estrés laboral y familiar que las está llevando a drogarse, prostituirse, al divorcio y, en algunos casos, hasta al suicidio.
De acuerdo con la organización Consultando Corazones que trabaja con mujeres en esa área de la frontera, se ha detectado un problema social en algunas colonias que parece agravarse. La mayoría de los casos se registran en zonas como Las Haciendas, Lomas del Rey, Mezquital, San Francisco, Tierra Nueva y División del Sur.
En el año, el personal que trabaja con los programas de la fundación ha atendido a unas 400 mujeres que han manifestado algún conflicto psicológico generado por la situación económica precaria, la carga de trabajo, el abandono de los hijos o los esposos y quedarse solas en la casa, indicó Delfina Hernández, directora de Consultando Corazones.
“Ellas tienen problemas de depresión, baja autoestima, problemas en el matrimonio, en las finanzas, la falta de perdón y problemas con los hijos”, expresó. Dijo que “vimos algunos casos de prostitución, suicidio por la falta de una familia estable”.
Detalló que han detectado el suicidio de por lo menos dos mujeres en el último año que ya habían sido atendidas por el personal de la organización y otras cinco que alguna vez intentaron quitarse la vida y siguen recibiendo tratamiento.
Ayer, la asociación civil ofreció un programa de talleres y conferencias a unas 300 mujeres que dijeron sentirse deprimidas. Se les dieron pláticas de todo tipo, desde salud emocional y espiritual, hasta física.
El evento se realizó en el centro familiar Compañerismo de Gracia, ubicado en la calle Verbena, en la colonia El Mezquital. Ahí se dieron consultas médicas y pláticas sobre nutrición, matrimonio, autoestima y finanzas, por parte de pastoras evangélicas y misioneras, se dio a conocer.
Además atención psicológica, de ginecología, medicina general, dentistas y hasta asesoría legal.
Verónica Del Río es una de las mujeres que buscó apoyo cuando estaba pasando problemas familiares.
“Estaba buscando una vida libre, con propósito”, mencionó.
Comentó que ella llegó a esa comunidad después de que se sintió abandonada por sus hijos y de dedicarse al hogar toda su vida y se quedó sola cuando crecieron. Ahora dice que participar en las conferencias le cambió la vida.
La directora de Consultando Corazones dijo que buscan darles ayuda psicológica y espiritual, “y decirles que tienen una esperanza, resaltando los valores y la palabra de Dios”.
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