Javier Olmos/
El Diario de Juárez
Tras vivir 25 años de violencia doméstica al lado de su esposo, la juarense María Covernali Ortiz tomó la decisión de ayudar a otras mujeres que como ella vivieron el infierno de ser golpeadas y abusadas física y psicológicamente, pero fue más allá al expandir su deseo de ayudar a otros sectores, como el de los migrantes.
Hoy, a diez años de crear la fundación Familias Triunfadoras Inc., en El Paso, donde radica actualmente, se ha merecido el reconocimiento local y nacional en Estados Unidos por apoyar a mujeres y niños vulnerables en aquella comunidad, aunque ha traído hasta este lado de la frontera esa vocación altruista, nacida a raíz de una severa golpiza que le propinó su exmarido.
“Lo que a mí me impulsó a ayudar a la gente fue que yo toqué muchas puertas cuando estaba dentro de la violencia, pidiendo que alguien me dijera que todo iba a estar bien”, recordó.
Covernali viene a Juárez por lo menos una vez al mes para entregar despensas, ropa, cobijas y útiles escolares a familias que viven en los sectores más vulnerables y a los migrantes y sus hijos que vienen de otras partes del país y Centroamérica para cruzar a Estados Unidos. Dijo que cada vez las peticiones de apoyo por organizaciones locales en Juárez se hacen más frecuentes.
Aquí visita mensualmente a dos orfanatorios, el primero Niños Victoriosos, y el otro de la iglesia católica San Martín de Porras, además de la colonia Tarahumara, entre otras.
Además lleva información sobre la diabetes tipo 2, acompañada de adolescentes y jóvenes paseños que se han certificado a través de su organización como promotores de salud.
A través de su organización, participan unas 50 mujeres voluntarias y se han capacitado a más de 400 adolescentes y jóvenes como promotores de salud, poniendo en marcha 18 programas de apoyo a quienes necesitan una vivienda, han sido víctimas de algún tipo de violencia, así como a niños y adultos mayores.
En general, estimó, Familias Triunfadoras ha brindado algún tipo de apoyo a unas 8 mil personas cada año, desde su fundación.
Aunque todo tuvo un inicio. Uno de los relatos más fuertes que tiene para contar la activista es el que la impulsó a trabajar por las mujeres víctimas de violencia familiar.
Su marido, de quien se divorció hace diez años, la golpeaba todos los días, hasta que su hartazgo y su valentía, que la mantuvo firme durante ese tiempo por sus hijas, la llevaron a separarse de él y velar por muchas mujeres que se encuentran en la misma situación que ella.
“Yo duré 25 años casada dentro de violencia, perdí mis dientes de enfrente por una apuesta de mi esposo por una troca”, recordó.
“Los amigos de mi exmarido ya sabían que siempre me golpeaba y hubo uno que le dijo ‘te apuesto mi troca a que no llegas y le pones una… a María’, fue un 31 de diciembre cuando yo me estaba lavando mi cara, él llegó para atrás y me dio fuerte en el zinc y ahí perdí mis dientes”, se acordó.
“Una vez me sacó los discos de las vértebras, fue mucha la violencia la que viví y ahí dije: yo tengo que hacer algo, porque vienen muchas mujeres atrás de mí y estoy viva gracias a Dios”.
Familias Triunfadoras, como se llama su fundación, se creó con el objetivo exclusivo de ayudar, apoyar, abogar, buscar recursos para las víctimas y sus familias, “pero ya una cosita llevó a otra, entonces ahorita ya terminamos como con 18 proyectos en la organización”, entre los que se incluyen el apoyo a migrantes que viven en ambos lados de la frontera, comentó Covernali.
Lo que ahora ella le pide a las mujeres que viven algún tipo de violencia es que resistan y sigan tocando puertas.
“Algún día les van a abrir, no se cansen”, expresó y agregó: “en una relación así creo que los niños son los más afectados, y siempre he dicho que son las víctimas número uno”.
Covernali y su fundación alistan en El Paso una colecta de útiles escolares para entregarlas aquí en Juárez a principios de septiembre.
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