Staff/El Diario de Juárez
2017-08-15La experito de la Fiscalía estatal, Claudia Elvira López Gutiérrez alias “La Patrona”, así como dos personas más fueron reconocidas como responsables de un secuestro ocurrido en 2013.
La víctima compareció ayer ante un Tribunal de Enjuiciamiento y dijo estar plenamente segura que López, Dulce Concepción Guadalupe Arguijo Ibarra y Ricardo Flores Venegas la privaron de su libertad para llevarla a una casa de cautiverio y pedir un rescate de un millón de pesos.
Desde una sala privada, para resguardar su identidad, la víctima recordó que después de las 6 de la mañana del 19 de julio del 2013 ella llegó a una guardería de su propiedad ubicada en la avenida Manuel Gómez Morín del fraccionamiento El Crucero, saludó a un guardia de seguridad y en ese momento fue interceptada por “La Patrona” y por Flores Venegas.
Estas personas la amagaron para subirla a un vehículo Sable y la llevaron a una casa de seguridad, de la que dijo no saber el domicilio pero sí la pudo describir.
En la casa de cautiverio fue cuidada por Dulce Concepción, afirmó, para agregar que esta persona la trató muy bien, la llevaba al baño y le ayudaba a bajarse el pantalón y la ropa interior porque fue amarrada de las manos con tape y le vendaron los ojos.
La víctima explicó que ese mismo día Dulce le dijo que la iba a liberar pues ya se habían ido las otras dos personas. Luego la trasladó a la calle Valle del Sol cerca de una plaza comercial y le señaló “aquí te voy a bajar, no voltees”. Por lo que la empresaria caminó hasta que tres jóvenes le preguntaron qué le pasaba y ella les pidió prestado un celular para hablarle a su esposo.
Anteriormente, en otra diligencia, rindió declaración el esposo de la víctima. Él dijo que su pareja fue liberada antes de que él pagara el rescate. Sin embargo, acudió a un estacionamiento domiciliado en la zona Centro frente a la Aduana a dejar el dinero. Arrojó 24 mil pesos.
Ayer el fiscal a cargo del caso, le preguntó a la víctima si podía reconocer a los responsables del secuestro y ella respondió que sí para luego señalarlos a través de la pantalla que se instaló en la sala privada donde se observaban todos los presentes en el recinto principal, entre ellos los acusados. También reconoció la casa de cautiverio, en la serie fotográfica que le fue mostrada.