Javier Olmos/
El Diario de Juárez
La construcción del muro y la prohibición de las “ciudades santuario” que está agilizando el Gobierno de Estados Unidos van a ocasionar un mayor número de migrantes, advirtió el obispo de El Paso, Mark Joseph Seitz.
“Si ese sentido de confrontación, de esfuerzos, si construimos un muro; los migrantes están experimentando una desesperación y van a tratar de cruzar de maneras cada vez más y más peligrosas”, avizoró.
Y agregó que “entonces muchas veces las acciones de los políticos, del gobierno, tienen efectos no anticipados y ahora hay un gran miedo porque las autoridades van a experimentar más muertos en la frontera”.
El líder religioso asistió ayer al Encuentro Binacional de Familias Migrantes y Repatriadas, “Realidad, Diálogo y Compromiso”.
Ahí expuso la necesidad de que el gobierno norteamericano redirija los 18 billones de dólares que anualmente invierte en la seguridad de sus fronteras a resolver el verdadero problema de la inmigración.