Juan de Dios Olivas/
El Diario
Cientos de vendedores informales invaden sin control vialidades, banquetas, estacionamientos y andadores peatonales del Centro Histórico para expender en forma hacinada desde alimentos y ropa hasta productos ‘piratas’.
El problema fue documentado en una revisión a los bienes patrimoniales del Municipio en la zona Centro practicada el mes pasado por la Sindicatura e incluida en el tercer informe del síndico Aarón Yáñez.
Los comerciantes expenden alimentos en forma insalubre, obstaculizan la circulación vial y peatonal y afectan la publicidad e imagen de comerciantes formales a quienes les bloquean los accesos a sus locales, indica el informe.
El documento que contiene 294 observaciones señala la violación constante de artículos de los reglamentos de Desarrollo Urbano, para el Ejercicio del Comercio en Puestos Fijos, de Vialidad y Tránsito, del Entorno e Imagen Urbana, el Código Penal Federal, así como el Reglamento de Tránsito para Rutas de Carga al utilizar camiones de carga como módulos de venta.
El reporte elaborado tras quejas ciudadanas presentadas a la Sindicatura, fue entregado formalmente a la Dirección de Regulación Comercial a cargo de Flor Karina Cuevas Ortega para solicitarle se apliquen las normas municipales.
El personal de la Sindicatura Municipal realizó las inspecciones físicas sobre las calles 2da de Ugarte, Libertad, Vicente Guerrero y calles aledañas donde documentaron con una serie fotográfica el descontrol que prevalece.
“Los comerciantes invaden el paso peatonal a todo aquél que pretenda cruzar las calles, dejando así mismo, obstrucción en las calles, no respetándose las áreas de ascenso y descenso incluso”, establece una de las observaciones.
En otra refiere que se presentan alimentos que son expuestos a condiciones insalubres al permanecer estos en el suelo y la ropa que se exhibe en las calles en su mayoría es piratería, infringiendo así varios ordenamientos locales y federales.
En cuanto al hacinamiento que existe, señala que obliga a los peatones a caminar por las calles poniendo en riesgo su integridad e impidiendo incluso la limpieza e higiene de las vialidades.
El informe indica que uno de los artículos que se violenta es el 27 del Reglamento para el Ejercicio del Comercio en Puestos Fijos en la zona denominada Centro de la Ciudad al ejercer actividades de comercio en términos distintos a los que establece su permiso, toda vez que se carece de esa autorización oficial para vender y quienes la tienen, no la exhiben en forma permanente como establecen las normas.
La revisión de la Sindicatura también documenta la violación al artículo 2, fracción XX, del Reglamento de Vialidad y Tránsito que prohíbe bloquear las vialidades.
Por ello, la Sindicatura recomienda al Municipio que se implementen las medidas de seguridad necesaria para no exponer la integridad física de los peatones ni la seguridad vial de los automóviles.
Un problema añejo… y en aumento
La sobrepoblación de ambulantes en el Centro Histórico es un problema añejo y que se ha agravado recientemente.
Apenas en mayo, comerciantes establecidos externaron su queja al Gobierno Municipal, pues denunciaron que se apostan donde quieren y a ellos les complican su venta y hasta la entrada y vista de sus locales. Aparte de que siempre dejan sucio donde operan.
Reclamaron además que mientras a los vendedores ‘de a pie’ se les liberó del único pago que realizaban al expedirles gratis ahora el permiso, quienes se insertan en el comercio organizado pagan insumos cada vez más caros, rentas en dólares, sueldos y servicios.
De acuerdo con el informe “Así Estamos Juárez 2017” –elaborado por la asociación civil Plan Estratégico de Ciudad Juárez–, el ambulantaje fue el sector que más licitaciones obtuvo por parte de la Dirección de Comercio, mientras que los negocios fijos y semifijos registraron una reducción con respecto a años anteriores.
Con base en datos oficiales, el reporte revela que el ambulantaje pasó de tener 612 vendedores en 2014, y 399 en el 2015, a 17 mil 378 que en 2016 tramitaron permiso.
Ante ello, el alcalde Armando Cabada Alvídrez aseguró que el padrón actual de vendedores ambulantes es el mismo que el año pasado.
Dijo que el número de vendedores informales en el primer cuadro de la ciudad es variable, porque los inspectores de la Dirección de Comercio los retiran, pero después se vuelven a instalar, por lo que habló de un proyecto integral en el que también estén involucrados los ambulantes, pero del cual hasta el momento nada se ha informado.
La entonces directora de Comercio municipal, Alejandra Molina Molina, declaró que el aumento se debió a que los permisos de los comerciantes ahora son gratuitos y en años anteriores se les cobraban.
En octubre del 2016 el Cabildo aprobó por unanimidad eliminar el cobro de los permisos para ambulantes fijos y semifijos, ya sean de tipo anual, temporal o por día.
Con un padrón de 17 mil 800 vendedores ambulantes, el Municipio recabó hasta octubre del año pasado 8 millones 800 mil pesos por concepto de pago de licencias, se informó.
Actualmente la proliferación de ambulantes en la zona Centro es evidente en el paso peatonal de la avenida 16 de Septiembre –en pleno corazón del Centro Histórico–, donde no es necesario caminar más de 10 pasos para encontrar a vendedores de todo tipo de productos y alimentos. (Juan de Dios Olivas / El Diario)
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