Blanca Carmona/
El Diario
Uno de los dos acusados de haber asesinado a ocho miembros de una familia en noviembre del 2013 por una presunta venganza relacionada con la monta de perros pitbull, ayer fue encontrado culpable. El otro procesado fue absuelto, al concluir un Tribunal de Enjuiciamiento que no hay pruebas para considerarlo responsable.
El fallo condenatorio se emitió en contra de Jesús Daniel Mendoza Hernández alias “El Tomate” y Edgar Uriel Luján Guevara fue considerado inocente.
Mendoza podría ser sentenciado a una pena mínima de 220 años de prisión, aunque el Ministerio Público (MP) pidió un castigo de 460 años de cárcel así como el pago de 2 millones 691 mil 600 pesos como indemnización por muerte a favor de los deudos y de 57 mil 500 pesos de gastos funerarios a favor de Gobierno del Estado.
El juicio oral instruido en contra de ellos inició el pasado 15 de febrero con la lectura de la acusación formulada por el agente del MP Mario Gómez Rentería, adscrito a la Fiscalía General del Estado Zona Norte, en la que señaló que el multihomicidio se cometió alrededor de las 21:00 horas del 16 de noviembre del 2013 en una vivienda ubicada en el número 1070 de la calle Luciano Becerra de la colonia Morelos Zaragoza.
Cuando cuatro hombres, Mendoza Hernández, Luján Guevara y dos personas que hasta el momento no han sido detenidas, ingresaron a la casa y utilizaron armas blancas para asesinar a María del Carmen Morales Infante y sus hijas Rosa María y María del Carmen Castañeda Morales; el esposo de esta última, Máximo Martín Romero Sánchez, así como los hijos de esa pareja Daniel y Janeth Abril de seis y cuatro años; la hija de Rosa María, Valeria Lizbeth Lara Castañeda de tres años y el primo de las hermanas, José Antonio Lares Padilla.
De acuerdo a la teoría del MP el objetivo del atentado era Máximo Martín Romero Sánchez, por una deuda relacionada con la venta de una perra para que fuera cruzada.
Al emitir el veredicto, el Tribunal de Enjuiciamiento dio por acreditado el asesinato de las ocho personas con las declaraciones de los médicos forenses que practicaron las autopsias, con el informe en materia de criminalística y las versiones de dos familiares de las víctimas, la persona que encontró los cuerpos y otro familiar, entre otras pruebas.
El referirse a la responsabilidad penal, las juezas le dieron valor a la declaración que rindió “El Tomate” ante el MP en la que señaló que ese 16 de noviembre él se puso de acuerdo con los otros hombres en el exterior de la casa de las víctimas y al entrar los amarrarpn con cinta, tomaron varios objetos, como las carteras para sustraer el dinero, luego él sujetó a Máximo para que los otros lo mataran.
Esos datos lo unieron con el informe en materia de química forense y el informe en genética. En el primero se establece que había sangre humana en unos zapatos de “El Tomate” así como en un calzado encontrado en una vivienda cateada, propiedad que fue localizada a partir de los datos que “El Tomate” aportó y que pertenece a una de las dos personas prófugas.