Karen Cano
El Diario
En la calle Pescadilla de la colonia Anapra, el luto ha cimbrado a los vecinos, quienes sólo escucharon el impacto que arrebató la vida a las niñas Michel Leyva e Ilse García, de 12 y 10 años.
Las niñas jugaban, junto con otros cuatro menores, en el patio de la casa de una de sus primas, cuando un ebrio los arrolló tras impactarse contra la barda de dicha vivienda.
“No son nuestros familiares, pero son nuestros vecinos y amigos, los estimamos mucho y nos sentimos muy tristes”, dijo una de las residentes del lugar.
“Queremos que se haga justicia”, dijo entre lágrimas otra de las vecinas.
El enérgico llamado se extendió entre los juarenses que consternados por la fatal noticia exigen la cárcel para el responsable, así como agravar el castigo para los conductores ebrios.
Hasta ayer los menores lesionados: Evelin Salazar Cardoza, de 13 años; Javier Alexander Acevedo, de 5 años; Belén Alondra Cardoza Villegas, de 10, y Jacqueline Salazar Cardoza, de 12, permanecían hospitalizados, se informó.
En tanto que el conductor presunto responsable José Ángel Becerra Ruiz, de 59 años, quien resultó con tercer estado de ebriedad en la prueba de alcoholemia, se encontraba detenido y en víspera de ser consignado al Ministerio Público.
El alcalde Armando Cabada Alvídrez, solicitó ayer a través de sus redes sociales donaciones de sangre tipo B positivo y O positivo para los menores.
“Se necesitan donadores de sangre para los niños del accidente de anoche. B positivo y O positivo. Acudir al banco de sangre del Seguro No. 6”, dice la publicación del alcalde.
“Nunca pensé que esto pasaría”, lamentó una más de las vecinas quienes ayer se juntaron cerca de la vivienda donde ocurrió el accidente, en espera de información del estado de salud de los menores que están hospitalizados.
Luz Elena incluso se lastimó un pie luego de que salió corriendo apresurada para saber qué había ocurrido.
“Yo mandé a mi hija a la tienda y escuché gritos. Tuve mucho miedo y salí corriendo. Mi hija vio todo, está como en shock”, comentó la madre de familia.
La tienda a donde esta pequeña había acudido, está apenas a unos metros de la casa donde se registró el accidente, y según Luz Elena, la niña se había detenido en la banqueta cuando vio la velocidad que llevaba el conductor que terminó impactándose contra la barda de dicho hogar.
El accidente se registró el pasado miércoles alrededor de las 9:00 de la noche en la vivienda 303 entre las calles Pescadilla y Lenguardo Irapuato de la colonia Anapra.
En un recorrido por el lugar, ayer se apreció que todas las vialidades y accesos son calles sin asfalto, accidentadas y de una constitución propia que no permite la circulación adecuada de los vehículos.
Los residentes aseguran que nadie respeta los altos y que regularmente no se sienten tranquilos dejando que los niños jueguen en la calle, pues sobre todo los vehículos de transporte de personal suelen manejar a exceso de velocidad y varias veces han estado a punto de perder el control.
“Nos dicen que si queremos que nos pongan pavimento, pero yo creo que sería peor, lo agarrarían como carretera, lo que queremos es justicia”, clamó una de las residentes de Anapra. (K. Cano / El Diario)