Salvador Castro/
El Diario
Un niño de cinco años murió ahogado ayer por la tarde en la alberca de un jardín de eventos ubicado en las calles Grosella y Frijol de la colonia El Granjero, a donde su familia acudió para participar en un convivio.
Protección Civil clausuró el lugar ya que los encargados no mostraron documentación, no estaba registrado y además no tenían salvavidas.
El menor fue trasladado por paramédicos de la Cruz Roja a la Clínica Centeno, pero en el lugar el personal médico reportó a las autoridades que ya había fallecido.
Hasta la clínica acudieron elementos de la Fiscalía General del Estado y más tarde se trasladaron al jardín de eventos donde ocurrió el accidente, para iniciar las investigaciones y establecer cómo ocurrieron los hechos.
Los agentes entrevistaron a familiares y otras personas que acudieron al convivio.
Efrén Matamoros, director de Protección Civil del Municipio, informó que el jardín de eventos no lo tienen registrado, por lo que para la dependencia es un lugar clandestino, ya que no mostraron documentación, ni había un salvavidas en la alberca.
Dijo que como primera medida procedieron a la clausura del negocio Jardines Las Glorias.
“Había mucha gente en el lugar; no me explicó por qué nadie se dio cuenta, ya que la alberca está pegada donde estaba toda la gente sentada, sólo los dividía cinco o seis metros”, expresó Matamoros.
Dijo que nadie vio manotazos ni escuchó gritos del niño pidiendo ayuda, ya que nadie supo nada.
Matamoros mencionó que al notar la desaparición del niño los familiares fueron a buscarlo al baño, “pero en realidad el niño ya estaba flotando en la alberca”.
Señaló que no se explica cómo es que si había más menores en la alberca, ninguno observó o avisó a algún adulto que el niño se estaba ahogando.
“Fue increíble ver toda la gente y que nadie se haya fijado en el menor; en la alberca no había salvavidas, no mostraron documentos, no tenía una persona encargada de estar ahí pendiente de la alberca”, insistió el funcionario.
Dijo que cuando revisan las albercas entran al lugar y si el salvavidas no está ahí parado, únicamente dedicado a eso, clausuran la alberca.
Mencionó que en el entrenamiento que se les da a los salvavidas se prohíbe que el salvavidas vaya por las sodas, que esté recogiendo boletos o esté haciendo limpieza, ya que su labor es estar ahí de pie observando a todos los que anden en la alberca.
“Pedimos a la comunidad que nos informe de este tipo de lugares, porque si no los detectamos van a seguir ocurriendo situaciones como la registrada en este jardín de eventos. Este tipo de lugares deben de estar cerrados si no tienen documentación ni salvavidas”, expresó.