Blanca Carmona/
El Diario
Los agentes ministeriales acusados de privación de la libertad, abuso de autoridad, uso ilegal de la fuerza pública y delitos en el ámbito de la procuración de justicia, presuntamente cometidos en contra de la propietaria de una funeraria, rindieron ayer declaración para afirmar que son inocentes y que sí detuvieron a la víctima porque estaban investigando el ocultamiento de un cadáver.
Los elementos de la Policía Estatal Única (PEU) División Investigación, Pedro Iván Villalobos Rodríguez, María del Rayo Luévano Chávez y Jesús Solano Abasta son las personas sujetas a proceso penal por presuntamente actuar de forma irregular contra Luz Adriana Ríos Acosta, una de las dueñas de la Funeraria Ríos.
Los hechos ocurrieron el pasado 12 de febrero alrededor de las 13:30 en la funeraria ubicada en la avenida 16 de Septiembre y Cromo de la colonia Del Carmen.
Ayer el primero en rendir declaración fue el comandante Pedro Iván Villalobos, quien refirió que ese día fueron enviados a una casa en la calle Dámaso y Bruselas de la colonia Progresista porque una persona de 64 años había fallecido y encontraron que el cadáver ya había sido levantado por Ramón Guerrero Cisneros.
Llegaron a las oficinas de la Funeraria Ríos, donde le pidieron información a Luz Adriana Ríos y ésta se negó a poner a disposición a Guerrero; él ordenó la detención de la mujer tras consultar a la titular de la Unidad de Delitos Contra la Vida, Jordana Martínez, quien le dijo que estaban ante un delito flagrante, afirmó.
Villalobos también refirió que Jordana Martínez interrumpió una diligencia de la Policía Ministerial y puso en libertad a Luz Adriana Ríos.
Al parecer el comandante omitió señalar que antes de que el cadáver fuera recogido, policías municipales habían considerado innecesaria la presencia de los ministeriales, pues paramédicos determinaron que la muerte fue por causas naturales.
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