Horacio Carrasco Soto
El Diario
El gobernador Javier Corral presidió hoy la primera audiencia pública que realiza su administración en esta frontera, a la cual acudieron miembros de su gabinete y funcionarios locales, además de cientos de juarenses que buscan solución a sus problemas.
El evento se planeó para ejecutarse de 9:00 a 17:00 horas en el vestíbulo de la Unidad Administrativa José María Morelos y Pavón de avenida Abraham Lincoln y calle Zempoala, en el fraccionamiento Córdova Américas.
Antes de iniciar la audiencia, Corral Jurado sostuvo una reunión con miembros de su gabinete y funcionarios locales para analizar avances de objetivos y metas.
Una vez que inició el evento, el mandatario estatal atendió primeramente a María Elena Olivas, de 72 años, quien acudió a plantearle “un problema de agua sucia” en su casa y de cortes en el servicio “sin deber ni un cinco”.
Ella vive en el fraccionamiento Paula Mascareñas, agregó.
El gobernador dispuso que se resuelva su problema cuanto antes y la mujer fue atendida por el presidente de la JMAS, Jorge Domínguez Cortés.
Se dispusieron 22 módulos para las diferentes dependencias estatales, además de una mesa en el centro para Javier Corral.
A las 12:00 horas, el registro indicaba la asistencia de 30 personas que acudieron a entrevistarse con el gobernador y 195 más con otros funcionarios estatales.
El mandatario dijo que este ejercicio habrá de llevase a cabo el primer lunes de cada mes y acudirán todos los miembros del gabinete estatal.
Se tendrá un sistema de seguimiento puntual a las peticiones que allí se hagan para ver el avance en la solución que se demanda, dio a conocer.
Esto para patentizar la voluntad del gobierno de encontrarse de manera directa con los juarenses, sus problemas y necesidades, agregó.
“Queremos inaugurar una nueva forma de gobernar en cercanía con la gente, atendiendo cada una de las inquietudes y problemas que las personas tienen en su desarrollo personal, familiar y social”, expresó.
El señor Valentín Macías Escobar fue a pedir ayuda porque su esposa María Dolores Quintero padece cáncer y el Seguro Popular no le cubre toda la atención.
“Espero que me apoyen, creo que sí van a hacerlo”, dijo. “Tiene cáncer en la columna y se encuentra un poquito malita”.
Mientras él hace gestiones donde sea necesario, su mujer recibe ayuda en Aprocáncer, que es una organización de la sociedad civil, agregó.
“Espero que en esta nueva administración volteen a mirarme porque en la anterior ni para pastillas ni para nada”, expresó.
Informó que los funcionarios de Seguro Popular acordaron hacer lo necesario para ayudar a su esposa, con quien tiene un hijo y una hija de 15 y 16 años, respectivamente.
El representante local del Seguro Popular, Rogelio Loya Luna, dijo que el problema es que ese servicio no le cubre todo a la mujer enferma, pero van a ver la manera de brindarle la ayuda que necesita para que salga adelante.
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