B. Carmona/F. Chávez/
El Diario
Francisco Moreli Espidio, de 39 años, es el nombre del reo del Cereso Estatal 3 que se suicidó al provocarse varias heridas con un cuchillo, de acuerdo con el reporte de la Fiscalía General del Estado (FGE).
El interno se quitó la vida en el área conyugal del penal, pasando entre 8 a 10 horas para que su cuerpo fuera descubierto, indica el reporte oficial.
La necropsia arrojó que el cadáver presentaba heridas por arma blanca en el cuello y las muñecas.
De acuerdo con familiares de internos, el hallazgo fue alrededor de las 5:00 de la tarde del domingo.
Culpable de homicidio
Moreli Espidio iba a ser sentenciado el próximo viernes, pero tras el fallecimiento la causa penal será sobreseída.
Ayer familiares del interno apodado “El Güero” acudieron a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado Zona Norte a reconocer el cadáver y extraoficialmente señalaron que sospechan que fue asesinado, pues al parecer presenta golpes en las manos y días antes había sido amenazado de muerte.
Los deudos decidieron no dar más datos por miedo a represalias por parte de las personas que al parecer atentaron contra la vida de Moreli, quien apenas el viernes pasado fue encontrado culpable de asesinar a otro hombre.
El veredicto condenatorio fue emitido por el titular de un Tribunal de Enjuiciamiento Unitario, Andrés Barrera Rubio, quien consideró que sí existen pruebas para acreditar que él asesinó a Juan Antonio Santillán Reynoso en el 2015 en una vivienda ubicada en la calle Sol de la Finca del fraccionamiento Praderas del Sol.
Después de emitir el fallo el juez citó a la agente del Ministerio Público (MP), al abogado defensor y al procesado para otra audiencia a realizarse el siguiente viernes a fin de dar a conocer cuál era la pena que debería compurgar Moreli Espidio. El MP había solicitado 40 años de prisión.
El domingo pasado la familia de Moreli Espidio se presentó en el reclusorio para visitarlo, pero las autoridades carcelarias les negaron el acceso indicando que no estaban autorizados para entrar. Sin embargo, al parecer fue una mentira para retrasar la noticia de que había muerto en una de las celdas.
Los familiares permanecieron en el reclusorio hasta pasadas las 19:00 horas cuando observaron la llegada de agentes ministeriales y de la unidad del Servicio Médico Forense (Semefo).
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