El Diario
2016-10-25
“Se oyó un tronido fuerte, como cuando se revienta la llanta de un camión, no pensé que fuera una explosión”, dice con elocuencia y moviendo los brazos José Luis Carrejo, velador de uno de los negocios contiguos a la gasolinera donde la noche del lunes ocurrió una explosión e incendio.
Eran casi las 21:40 horas cuando escuchó el primer estallido, así que salió a ver qué ocurría, vio a tres personas corriendo para atravesar la avenida, lo que le sorprendió, al voltear hacia su lado derecho apreció las llamas que salían de la plataforma de un automotor que estaba enseguida de las bombas surtidoras.
La lumbre salía de la plataforma del camión, segundos después sobrevino otra explosión, más fuerte que la primera, entonces corrió a tomar su radio para comunicarse con sus supervisores y solicitar que hablaran a los bomberos ante la magnitud del incidente.
Contrario a la versión que circuló anoche, que indicaba que el vehículo portaba depósitos para cargar gasolina, Carrejo afirma que no observó ninguno sobre la parte trasera del camión.
Emocionado, platica lo que ocurrió anoche a sus compañeros de trabajo, quienes llegaron por la mañana al sitio para toparse con la sorpresa del hecho.
La agencia de autos que vigila en la noche, ubicada al lado de la gasolinera incendiada, no sufrió daños, tampoco las unidades nuevas que estaban estacionadas a unos 30 metros de donde se originaron las flamas.
“Los bomberos me dijeron que revisara adentro (del local) para ver si se había prendido algo, toqué las paredes para ver si estaban calientes, pero no, no pasó nada”, recuerda.
En el sitio quedan como huella del accidente charcos y la estructura del expendidor quemada y retorcida.
Las actividades en el sector comenzaron de forma normal, sólo quedan sin suministro eléctrico la agencia de automóviles y el casino que funcionan a un lado de la gasolinera, mientras que el expendio de combustible que está justo enfrente de donde ocurrió el incidente también está sin funcionar.