Maricela Morones/
El Diario
Un muro no detendrá nuestra fe, afirma Eduardo Hayen Cuarón, párroco de Catedral, quien exhortó a la comunidad a participar el próximo 2 de noviembre en la Misa Binacional.
Este evento religioso se realiza para recordar a los miles de migrantes que han muerto en su intento por ingresar a Estados Unidos.
“Ellos van en busca de un empleo, de salir adelante y desafortunadamente encuentran la muerte, es por eso que no vamos a dejar de orar por sus almas”, enfatizó el sacerdote.
Se contempla que en esta misa participen los obispos y presbíteros de Ciudad Juárez, El Paso y Las Cruces.
La festividad se genera a la altura de Sunland Park y Anapra, en donde se acondiciona temporalmente el lugar con una mesa y algunas sillas para realizar la misa. Hayen Cuarón expresó que tiene fe en que las autoridades norteamericanas generen leyes de migración justas para quienes buscan trabajar y superarse.
Se desconoce el número exacto de los migrantes muertos en esta frontera pero el sacerdote afirma que son miles de diversos puntos del país e incluso provenientes de Centroamérica.
“La solución no es crear muros, deberían crear puentes para mejorar la convivencia entre las comunidades”, expresó. En encuentros binacionales pasados, la malla divisoria se abría por algunos momentos y la gente rápidamente buscaba a sus familiares del otro lado de la frontera para darse un abrazo.
En algunos casos agentes de Inmigración de Estados Unidos tuvieron que intervenir para separarlos y que cada uno regresara a su zona.
Otros más se conformaban con tocarse.
Recordó el presbítero que durante las misas pasadas las personas se tocaban las manos a través de la malla pero eso ya no se podrá realizar. (Maricela Morones / El Diario)
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