Gabriela Minjáres/
El Diario
La priista Lizbeth Alonso Carreón, excandidata a diputada local y excoordinadora de Audiencias Públicas en el Gobierno Municipal, aseguró ayer que cumple con todos los requisitos legales para solicitar su jubilación y recibir la pensión vitalicia del erario que le corresponde conforme a derecho.
Ante los cuestionamientos ciudadanos y la polémica que se ha desatado ante la petición que hizo desde junio y que esta semana fue aprobada por la comisión de regidores a cargo de revisar estos casos, la exservidora pública descartó que haya sido favorecida o haya recurrido a influencias en este procedimiento administrativo que decidió realizar porque la normatividad se lo permite.
Explicó que por su fecha de ingreso al Municipio, en junio de 2000, le aplica el reglamento que permitía a los trabajadores jubilarse con 15 años de trabajo independientemente de la edad, aunque a la fecha las disposiciones han cambiado.
“Quiero decir que la solicitud es un derecho que todavía no ha sido autorizado por esta Administración, pero que hago porque cumplí con los años, porque me dijeron que tenía un derecho a solicitarlo como los más de 500 jubilados que existen y que a menor edad también se han jubilado”, sostuvo.
Lizbeth Alonso justificó la intención de jubilarse cuando apenas tiene 36 años de edad, porque destacó que empezó a trabajar desde muy chica, desde que tenía 18, y su retiro en el Municipio no implica que frenará su vida productiva cuando, subrayó, goza de sus facultades para seguir trabajando.
Además, argumentó que de seguir trabajando en el Gobierno local acumularía más antigüedad y con ello un mayor porcentaje de pensión por jubilación a la que en este momento puede recibir.
De acuerdo con el dictamen de la jubilación, por los 15 años de antigüedad laboral le correspondería el 55 por ciento del último sueldo devengado que es de 38 mil 480 pesos, por lo que recibiría una pensión de 21 mil 164 pesos mensuales.
“Ahora sí que no es cuestión por gusto o por influencias, que también se malinterpretó, es una cuestión de derecho que solicité como lo han hecho los jubilados que existen y que también se han aprobado en esta administración”, afirmó.
Detalló que ante las dudas planteadas principalmente por la regidora panista Norma Sepúlveda Leyva, quien forma parte de la Comisión de Trabajo, se hizo una revisión detallada de su caso y tuvo la oportunidad de presentar toda la documentación requerida, particularmente por los cambios de puestos, altas y bajas registradas en su expediente.
Sin embargo, reiteró que logró acreditar los 15 años de antigüedad para poderse jubilar y ahora sólo falta que el presidente municipal Javier González Mocken firme la solicitud para que proceda el trámite.
“No lo hago por una cuestión partidista (o por el cambio de Gobierno), no hay miedo a ser despedida, simplemente es un derecho”, afirmó Lizbeth Alonso, quien pidió a la ciudadanía ponerse del otro “lado de la moneda” para analizar su condición y determinar si harían lo mismo que ella o renunciarían al beneficio.
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