Luz del Carmen Sosa/
El Diario
Ciudad Juárez no garantiza una vida digna y segura para la mujer, concluye el “Primer Informe de Hallazgos de Casa Amiga, la dinámica de la violencia contra las mujeres en Juárez, 2013-2016”.
Julia Monárrez Fragoso, encargada de presentar el documento, destacó que los agresores son hombres del estado y en su mayor porcentaje los esposos de las víctimas.
Refirió que durante los últimos tres años, cuando Juárez “dejó de ser considerada la ciudad más peligrosa del mundo para convertirse en el modelo exitoso por la rápida recuperación de la seguridad”, Casa Amiga atendió a 18 mil 950 víctimas de la violencia contra la mujer.
Es decir, 15 mujeres llegaron diariamente a pedir ayuda a Casa Amiga por sufrir algún tipo de agresión.
Este centro fue fundado por Esther Chávez Cano, el 3 de febrero de 1999.
“Lo que presentamos no sólo son cifras, detrás de cada número hablamos de una mujer que sufrió algún tipo de violencia”, destacó Lidia Cordero, directora de Casa Amiga, en la presentación de ayer en el Tecnológico de Monterrey, como parte de la alianza con el Instituto Nacional Demócrata (NDI, por sus siglas en inglés).
Otro dato que destacó Monárrez fue el hecho de que cada vez son más jóvenes las mujeres que sufren violencias.
Casa Amiga tenía identificado como grupo prioritario de atención a las mujeres entre 25 y 45 de edad. Pero, en los últimos tres años esto cambió.
“El 74.13 por ciento de las usuarias tienen entre 18 y 39 años.
“El rango de edad actual de las mujeres es significativamente menor, este nuevo análisis arroja un foco rojo respecto a la tendencia de que mujeres cada vez más jóvenes sufren violencia”, cita Lidia Cordero.
La procedencia de las víctimas es otra revelación, ya que la migración no es la causante del mal.
De las 18 mil 950 mujeres, el 56.2 por ciento proviene del estado de Chihuahua: principalmente de los municipios de Juárez, Chihuahua capital y Parral.
El resto procede de Durango, de donde provienen el 17 por ciento; de Coahuila con un 9 por ciento y Veracruz con un 7 por ciento.
Respecto al estado civil de las víctimas se informa que el 55.5 por ciento de las afectadas estaba casada, el 9.8 por ciento soltera y el 28.3 por ciento vivía en unión libre con el agresor.
Mientras que el 38 por ciento de las mujeres víctimas de la violencia solo había concluido sus estudios básicos.
Casa Amiga reconoce como usuarias prioritarias a las mujeres jóvenes, casadas y/o con pareja, con escolaridad limitada a secundaria, dedicadas al hogar y sin remuneración económica, con pocas oportunidades laborales.
“Dicho perfil es clave porque ofrece características específicas para entender y reflexionar sobre las pocas oportunidades académicas y laborales que tienen las mujeres en Ciudad Juárez”, destaca la directora de esta organización.
Estos datos llevan a varias conclusiones entre ellas que es obligatorio revisar la efectividad de los programas actuales de intervención y/o prevención.
“Nos preocupa que la población de mujeres con estas características no sea una prioridad de atención de las políticas públicas municipales y/o estatales, o bien, de los proyectos de apoyo brindado por otras organizaciones”, refiere Cordero.
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