Staff/
El Diario
Para Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera –recluido en el Cefereso 9 Norte de Ciudad Juárez desde el 7 de mayo- son irrelevantes los rumores en torno a Rafael Caro Quintero, de quien se ha dicho, pretende retomar el tráfico de drogas en el norte del país y su exportación a Estados Unidos.
“Para el señor (‘El Chapo’) no es tan relevante ese tema (Caro Quintero)”, precisa Andrés Granados Flores, abogado del líder del Cártel de Sinaloa, quien a su vez califica de absurda la versión de una posible guerra entre cárteles de la droga en esta frontera.
El defensor refirió que los dos narcotraficantes se conocen desde hace tiempo y que no hay indicios de una posible pugna entre ellos, tal como lo anunció a principios de mes la Fiscalía General de Chihuahua.
“Según lo que una vez comentó el señor (Guzmán), hace como 15 o 20 días que hablé con él, de que el señor Caro Quintero y el sobrino de Alfredo Beltrán (Alfredo Beltrán Guzmán ‘El Mochomito’) hicieron un relajo allá (en Sinaloa) con su mamá, y me contestó ‘el señor (Caro) ni se mete’”, dijo el abogado recordando una entrevista con su cliente.
Granados Flores precisó que el traslado de “El Chapo” a Ciudad Juárez fue una estrategia política del Gobierno Federal de la cual, el PRI pretende sacar provecho para las elecciones presidenciales del 2018.
“Pensaban que llevando al señor Guzmán a Juárez iba a cambiar la situación del PRI, pero ya vieron que no. Si creen que el señor Guzmán les va a ayudar a ganar las elecciones del 2018, lo dudo, les va a ayudar pero… a perder”, dijo.
El abogado dijo que las declaraciones del fiscal Jorge González Nicolás, pretenden desviar la atención de la sociedad con una posible guerra entre cárteles de la droga, para que no se hable sobre sus malos manejos en el estado de Chihuahua.
“Traen broncas y no saben qué decir para desvirtuar que saquearon a su estado”, dijo Andrés Granados Flores.