Francisco Chávez/
El Diario
Una serie de amparos obliga al Gobierno mexicano a resguardar la vida de Joaquín “El Chapo” Guzmán, preso en el Cefereso 9 de esta ciudad, dijo su abogado Juan Pablo Badillo Soto.
“Le he promovido a mi defendido 13 juicios de amparo, específicamente de la sentencia que dictó el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal de Primer Circuito, donde se pronuncia que en caso de que fuera reaprehendido, como lo fue, no fuese abatido, asesinado, masacrado, ultimado extrajudicialmente o desaparecido forzadamente y que no fuera extraditado”, explicó.
Indicó que esto resguarda los derechos humanos del narcotraficante y lo protege en la cárcel.
El litigante fue entrevistado ayer afuera del Cefereso, luego de que autoridades penitenciarias le negaron el acceso al penal.
El periódico Excelsior publicó en enero pasado que tras analizar algunos de los amparos interpuestos por la defensa de Guzmán, sus principales temores son la pena de muerte, la tortura, la extradición y ser abatido por grupos rivales.
“Con la interposición de amparos para evitar ser llevado ante la justicia estadunidense, El Chapo quiere evitar ser torturado a efecto de declararse culpable por los delitos que se le imputan e incluso tiene miedo a que en la Unión Americana le apliquen la pena de muerte”, cita la nota periodística.
Badillo Soto dijo ayer que al igual que los demás abogados al servicio del líder del Cártel de Sinaloa, él cuenta con dos permisos especiales para ver a su cliente, los cuales no se le han hecho validos en el Cefereso 9.
Él lleva la defensa de Guzmán Loera desde 1993, cuando el narcotraficante fue detenido en el puente internacional del Talismán, en Guatemala, y extraditado a México, donde fue ingresado al penal de Almoloya.
El defensor –egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad Juárez del Estado de Durango– dijo que los amparos más recientes en contra de la extradición de su cliente los lleva desde octubre de 2014, específicamente en materia constitucional.
Autoridades penitenciarias señalaron que la restricción de ingreso a Badillo obedece a que no tiene la calidad de defensor, pues no ha protestado el cargo ante el juez de Distrito que lleva la causa penal.
“Vine con la intención de tener comunicación con mi cliente, sin embargo, me pusieron obstáculos en virtud de que debo presentar una documentación, pero me dicen que eso pasará hasta dentro de 15 días”, dijo.
El defensor dijo que su intención era notificar a “El Chapo” el estado de los 13 juicios de amparo promovidos ante juzgados de Distrito, la mayoría para evitar su extradición a Estados Unidos.
Badillo Soto llegó ayer a esta frontera procedente de la Ciudad de México a las 7 de la mañana; se trasladó al Cefereso a las 08:00 horas y tras varias gestiones le fue negado el acceso. Al mediodía regresó al aeropuerto juarense para regresar a la capital del país.
Anunció que regresará una vez que consiga el permiso para ver a su cliente, no sin antes precisar que por ley el Gobierno mexicano no puede extraditar a Guzmán Loera.
“Es de gran interés para el señor (Guzmán) saber cómo está su situación jurídica, respecto a los juicios de amparo promovidos”, dijo.
La defensa agotó los permisos para poder visitar a “El Chapo” en el Centro Federal de Readaptación Social 9 (Cefereso), por lo que espera la autorización de autoridades penitenciarias para tramitar un pase especial.
Andrés Granados Flores, otro de los abogados del líder del Cártel de Sinaloa, dijo en entrevista reciente que desde el traslado de Guzmán Loera a Ciudad Juárez se les había autorizado dos permisos para poder verlo, los cuales se agotaron la semana pasada.
Refirió que a raíz del anuncio de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de aprobar la extradición de su defendido a Estados Unidos, han buscado por todos los medios comunicarse con su cliente, pero no han tenido éxito.
Eduardo Guerrero Durán, comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADPRS) de la Secretaría de Gobernación, dijo recién se dio el traslado del narcotraficante el pasado 7 de mayo, que las visitas al líder del Cártel de Sinaloa estarían limitadas durante su estancia en esta frontera. (Francisco Chávez / El Diario)
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