Gabriela Minjáres/El Diario
2015-07-04
En la incertidumbre y con lo básico para sobrevivir, decenas de personas se encuentran varadas en esta ciudad desde hace un mes, porque el Consulado de Estados Unidos en Juárez no les ha expedido las visas o tarjetas de residencia –‘green cards’– que ya les aprobaron.
Procedentes de diferentes ciudades como Nueva York, Chicago, Miami, Los Ángeles, San Francisco, Fresno, Kansas, Oklahoma y Dallas, los mexicanos llegaron a esta frontera a principios de junio a realizar el trámite migratorio que contemplaron podría tardar hasta 10 días, pero ya llevan 30 y siguen sin recibir los documentos.
Entre ellos hay familias completas con niños con edades que van desde los 10 meses hasta los 16 años, una mujer embarazada que dio a luz a su hijo en Juárez y personas con enfermedades que requieren atención médica.
“Hice planes para dos semanas: contraté a una niñera para que me cuide a mi hija de 4 años y pedí permiso en mi trabajo, pero ya tengo aquí casi un mes y no sé cuándo vaya a regresar porque en el Consulado no me saben decir nada en concreto, nomás me dicen que tengo que esperar, pero ya se me está acabando el dinero”, dijo Alejandra Aguilar, una mujer nacida en Puebla, pero que desde hace 17 años reside en Nueva York.
Acompañada de unas 24 personas que enfrentan la misma situación y que ha conocido en los hoteles cercanos al Consulado, Alejandra explicó que el origen del retraso en la entrega de sus documentos es la falla que se registró en el sistema de entrega de visas que la Oficina de Asuntos Consulares del Departamento de Estado en Estados Unidos reportó el mes pasado.
Sin embargo, aseguraron que las autoridades consulares no les dan informes precisos de cuándo van a liberar sus documentos, porque les dicen que pueden tardar horas o hasta meses, por lo que les han sugerido que mejor regresen a sus estados de origen en México, a donde no pueden volver porque ya no tienen familia ni dinero.
“Yo salí de mi tierra cuando tenía 13 años y ya ni siquiera la conozco, pero además ya no tengo dinero para viajar, ya me he gastado todo lo que tenía”, agregó Alejandra.
Las voceras de la sede consular no fueron localizadas ayer para conocer su versión de estos hechos, pero en la página de Internet del Consulado en Ciudad Juárez publicaron el 1 de julio un mensaje en el que aseguraron que la falla ya fue reparada y trabajan en los rezagos que tienen para actualizar sus operaciones.
“Si usted es un solicitante de visa que fue entrevistado después del 8 de junio, estamos trabajando para procesar su caso”, informa en el sitio ttp://ciudadjuarez.usconsulate.gov/
Todas las personas que forman parte del grupo que se encuentra en la ciudad comentaron que realizaron su trámite migratorio entre el 8 y el 22 de junio.
Los connacionales que se encuentran varados en esta ciudad en espera de su residencia son originarios de estados como Michoacán, Jalisco, Puebla, Chiapas, Guanajuato, Yucatán, Zacatecas, Campeche, Sinaloa, Chiapas y Nayarit.
Sin conocerse entre ellos, la situación los llevó a agruparse no sólo en los hoteles en los que se encuentran hospedados, a compartir habitaciones y la despensa, sino hasta en las redes sociales donde formaron al menos dos grupos para mantenerse informados y hasta por cuestiones de seguridad, porque ninguno conoce Ciudad Juárez.
Comentaron que si bien su grupo está conformado por poco más de 30 personas, saben que son muchos más porque tan sólo uno de los grupos que abrieron en Facebook tiene 93 miembros y porque en los hoteles y en las ventanillas del Consulado han conocido de otros casos, además de que saben de unos más que ya se fueron de la ciudad.
“Aquí había un puertorriqueño y uno de Tijuana que se fueron, otros se han ido a rentar casas porque no tienen dinero para pagar el hotel y porque dicen que con lo que gastan aquí en un par de noches pueden pagar una renta, aunque las condiciones son otras”, mencionaron.
Estimaron que sus gastos diarios alcanzan hasta 105 dólares, por lo que les representa el pago de la habitación en el hotel y la alimentación, aunque en ocasiones sólo hacen una al día por falta de recursos.
Aseguran que ya han perdido todos sus ahorros, se han visto obligados a pedir prestado a sus familiares en Estados Unidos y ya están muy desesperados.
“Esto es peor que el arresto domiciliario, nosotros no conocemos la ciudad, algunos ya nos quedamos sin dinero y sin trabajo por estar esperando los documentos y no nos dicen nada o una fecha exacta de cuándo nos puedan llegar, nos piden que nos regresemos a nuestros lugares de origen, pero ya no tenemos familia, hace más de 10 años que salimos de nuestra tierra”, explicaron.
Nataniel Paredes, ciudadano estadounidense que vino a solicitar la residencia para su esposa, agregó que además de la falta de información en el Consulado han recibido un trato despectivo, porque en ocasiones ya no los quieren ni atender.
“La semana pasada fui a preguntar, expuse mi caso en la ventanilla, les dije que ya no tenía dinero para seguir pagando el hotel y la persona que me atendido levantó el teléfono y ordenó un sándwich; me retiré indignado de la ventana, me parece que es una burla”, dijo el residente de Fresno, California, quien tiene en la ciudad desde el 8 de junio.
Los afectados aseguraron que también se han puesto en comunicación con los abogados que llevaron sus trámites migratorios, pero no pueden creer lo que les está pasando y les piden que acudan al Consulado, porque los trámites que se hicieron después del 22 de junio se han regularizado y están recibiendo sus documentos entre tres y 10 días, como originalmente ellos tenían planeado.
Lamentaron que el Gobierno de Estados Unidos les haya otorgado el perdón por permanecer de manera ilegal en ese país antes de regularizar su situación y hasta que les haya otorgado un “perdón de extremo sufrimiento” para evitar separarlos de sus familias y ahora están peor, porque ya no saben qué hacer.
“Ya no sabemos a dónde ir, lo único que queremos es que nos digan cuándo van a salir nuestros documentos, que revisen nuestros casos y que nos den prioridad porque el dinero se nos está acabando para seguir aquí”, agregaron.