J. Martínez/H. Carrasco
El Diario
Familiares de las víctimas del accidente ocurrido durante la reparación de un colector, en el que murieron intoxicados tres empleados y otro resultó herido, reclamaron que la empresa que los contrató nunca les proporcionó el equipo para trabajar al interior del drenaje.
“Ellos no cuentan ni con uniforme, menos con máscaras antigases y son los encargados de bajar a las alcantarillas y van tapando secciones con costales de arena para que luego otros realicen las reparaciones de los colectores”, dijo Héctor Barajas, sobrino de Roberto Orozco Espino, unos de los fallecidos.
Sin embargo, Pablo López Arzate, subdirector de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de la Conagua, señaló que según el informe que la empresa contratista GOCO Pavimento y Terracerías S.A. de C.V. –para la cual prestaban sus servicios los accidentados– rindió a la dependencia, los trabajadores sí contaban con equipo de seguridad, pero se desconoce por qué no lo utilizaron.
Familiares de Carlos Mauricio Lozano Orozco –quien permanece en el hospital en terapia intensiva– y de su tío Roberto Orozco, fallecido en el interior de la alcantarilla, aseguraron que en cuanto ocurrió el percance acudieron a la Fiscalía General del Estado para presentar una denuncia, pero no fueron atendidos.
“Ayer inmediatamente después de que supimos de la muerte de mi tío y que mi primo Carlos estaba muy grave nos fuimos a la Fiscalía para presentar una denuncia porque sabíamos que ellos trabajan sin equipo”, expresó Héctor Barajas.
Además indicó que temen que la empresa intente sacar a Carlos Mauricio del hospital privado donde se encuentra y llevarlo al Seguro Social para reducir sus costos.
El accidente donde murieron los tres trabajadores intoxicados con gas metano y otro más resultó lesionado ocurrió el miércoles en el colector Doblado, en el fraccionamiento Jardines del Seminario. Las víctimas fueron Roberto Orozco y los hermanos Noé y Víctor Hernández, mientras que Carlos Mauricio Lozano Orozco fue trasladado a un hospital.
La familia supo ayer que Juan Carlos González, propietario de GOCO, se encontraba en esta ciudad, aunque nunca lo vieron. Tampoco al ingeniero residente de la obra, César Vargas, quien también es originario de Torreón y llegó con el dueño y un abogado para atender el asunto.
“Así nos pasa a nosotros, no tenemos dinero y lo que queremos es trabajar y con tal de conservar el empleo pues aceptamos las condiciones, porque hay que llevar dinero a la casa”, dijo Rodolfo Orozco Espino, hermano de Roberto, quien tiene 15 años de experiencia trabajando en las alcantarillas.
A un lado su hermana María Olga Orozco, madre de Carlos Mauricio, aseguró que sólo quiere que su hijo se recupere y que haya justicia para él.
“No es justo lo que ocurrió, que muriera mi hermano y ver así a mi hijo, no sabemos si se va a recuperar totalmente, si va a poder trabajar y tiene a su bebé chiquito”, expresó.
Comentó que sus hermanos trabajan desde hace mucho en las alcantarillas y tienen experiencia, ellos invitaron a los sobrinos a trabajar “porque de algo hay que vivir”.
Aún molesto por la situación que vive su familia, Barajas dijo que los trabajadores están indefensos ante situaciones como ésta.
Relató que al tratar de interponer la denuncia en la Fiscalía acudieron de un lado a otro sin ser atendidos y finalmente desistieron.
“Fuimos a Delitos contra la Vida y de ahí nos mandaron a Delitos contra la Paz. La persona que estaba ahí de plano nos corrió, dijo que no teníamos nada que hacer ahí. Lo que nosotros queremos es que esto no quede impune para que la empresa no se eche para atrás y admita su responsabilidad”, expresó.
La familia considera que la muerte de Roberto y el hecho de que Carlos esté en terapia intensiva es algo que pudo evitarse.
Barajas comentó que hay empresas que tienen equipo de primera que van cerrando los tubos con burbujas de aire que se inflan desde fuera, pero en otras como para la que trabajaban se hace todo manual, es decir, uno a uno se ponen los costales de arena para tapar el colector y empezar con las labores.
A decir de la familia, los empleados trabajaban el miércoles colocando los costales para aislar la parte del colector en la que se iba a trabajar.
Dulce Alejandra Jasso, compañera de Carlos, permanece en la sala de espera del hospital Poliplaza Médica y mantiene la esperanza.
“Mi hermano Roberto ya no está pero mijo sí y tenemos que animarlo porque es muy fuerte y va a salir”, dijo María Olga cuando bajó de terapia intensiva luego de ver a su hijo.
Por otra parte, Pablo López Arzate, subdirector de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), señaló que en el informe que la empresa contratista GOCO rindió a los funcionarios de la dependencia inclusive les mostró fotografías y facturas de los accesorios que debían usar los accidentados.
Tienen derecho al Seguro Social
Las familias de los empleados tienen derecho a una pensión que otorga el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por muerte por riesgo en el trabajo, dijo el vocero de a instirución de salud, Rosendo Gaytán.
Señaló que las personas que fallecieron en el accidente contaban con Seguro Social y su familia cercana puede solicitar su pensión por muerte por riesgo de trabajo.
Agregó que el lesionado Carlos Mauricio Lozano tiene derecho a cobrar una incapacidad por accidente y en caso de que no se recupere totalmente el IMSS le otorga una pensión por invalidez o incapacidad permanente.
Las familias sólo deben acudir a su Unidad de Medicina Familiar y de ahí serán canalizadas a donde corresponda para que obtengan esta pensión, dijo Gaytán.
(J. Martínez/H. Carrasco/El Diario)