Blanca Carmona/
El Diario
Una prueba en materia de genética forense permitió vincular a proceso penal a un hombre acusado de secuestro, violación y homicidio de una menor de 14 años, ocurrido en el 2008.
La evidencia encontrada en las uñas y pantaleta de la víctima fue comparada con una muestra tomada al acusado Eduardo Rafael Huerta Fernández y se determinó que éstas pertenecen al mismo linaje paterno, es decir, coinciden con el procesado así como con el padre del acusado, Rafael Huerta, y de sus hermanos Efraín y Alejandro Huerta Fernández.
Lo anterior dio pie al juez Heber Fabián Sandoval Díaz para señalar, al dictar el auto de vinculación a proceso, que la investigación debe extenderse a todas las personas con las que coincide el perfil genético.
Además de esa prueba, el juez también le dio valor a las declaraciones de tres testigos en el sentido de que ellos vieron a Eduardo Rafael conduciendo el vehículo que presuntamente se utilizó para “levantar” a la víctima Diana Yaneth Flores López.
En la formulación de cargos, un agente del Ministerio Público señaló que entre las 22:00 y las 23:00 horas del 26 de noviembre de 2008 en el cruce de las calles Pino Suárez, Primitivo Uro y Cometa de la colonia Santa María, Huerta Fernández y otros hombres privaron de la libertad a la víctima.
Al parecer mantuvieron a la víctima retenida en un inmueble no identificado y aproximadamente dos horas antes de asesinarla, la violaron.
El 28 de noviembre en un lugar no determinado, la víctima fue estrangulada y su cuerpo arrojado en el cruce de las calles Los Ángeles y Buenos Aires.
Ayer el juez le otorgó al Ministerio Público seis meses para cerrar esta investigación.
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